Verónica Mollejo
Cómo
Cómo puedes cambiar las cuerdas de tu guitarra
Las cuerdas de la guitarra se suelen romper por el desgaste o una tensión excesiva, por ejemplo
Si eres un apasionado de la música y, además, tocas la guitarra con fluidez, lo más probable es que en alguna ocasión te veas obligado a cambiar las cuerdas de tu instrumento, algo que no todos los músicos amateurs dominan a la perfección.
En primer lugar, se recomienda sustituir las cuerdas antiguas por unas nuevas con relativa asiduidad, antes incluso de que estas se rompan, pues su estado influye directamente en el sonido y la afinación de la guitarra. El tiempo dependerá exclusivamente de las horas de uso y la sudoración de las manos, aunque suele ser conveniente hacerlo cada tres meses, aproximadamente.
Por otro lado, también es posible que se rompan debido al desgaste natural del material con el que están hechas (normalmente nylon y metal), una tensión excesiva o incluso los cambios bruscos de temperatura y humedad. En este caso, será imprescindible cambiar las cuerdas cuanto antes. ¿Cómo debes hacerlo?
Cambiar las cuerdas de tu guitarra es muy sencillo
El mercado está repleto de marcas y modelos distintos, la única manera de saber cuál va mejor a tu guitarra es ir probando y comprobar su sonido y rendimiento. En cuanto a su instalación, es fundamental que las cambies una a una, para mantener la tensión del soporte. Además, puedes aprovechar para limpiar el diapasón, que también requiere su mantenimiento. Ahora sí, ¿cómo debes cambiar las cuerdas de tu guitarra?
- Obviamente, el primer paso es retirar las cuerdas anteriores. Para ello, debes desenroscar las clavijas para aflojar la cuerda y así poder desatarla. No olvides deshacer los nudos del puente para que las cuerdas salgán con mayor facilidad.
- A continuación, coge uno de los extremos de la nueva cuerda e insértalo en el agujero del puente. Para que quede bien sujeto, haz un nudo cuando la cuerda comience a hacer presión.
- Lo siguiente es introducir el otro extremo de la cuerda en el agujero de la clavija correspondiente. Haz otro nudo y aprieta un poco la clavija para que la cuerda de varias vueltas y quede correctamente fijada.
- Por último, coge unas tijeras o un cortauñas y corta el extremo sobrante de las cuerdas. Luego, afina de nuevo la guitarra para que puedas volver a usarla como siempre.