¿Cómo se utilizan correctamente las luces antiniebla?

La niebla es uno de los fenómenos más frecuentes durante el invierno y, sobre todo, en los puertos de montaña y en las localidades situadas a una altura considerable respecto al nivel del mar.

Tal y como explican desde la Dirección General de Tráfico (DGT), "cuando la niebla aparece se reduce su visibilidad y el riesgo aumenta". En ese momento, a muchos conductores les entra la gran duda al no saber cómo utilizar correctamente las luces antiniebla del vehículo.

Según el Reglamento General de Circulación, concretamente, el artículo 106 expresa que solamente deben usarse los antiniebla traseros en situaciones cuando las condiciones meteorológicas o ambientales sean especialmente desfavorables, como en caso de niebla espesa, lluvia muy intensa, fuerte nevada o nubes densas de polvo o humo. 

Las luces antiniebla delanteras no son obligatorias y por eso no todos los coches las tienen. Sólo podrán emplearse cuando haya baja visibilidad debido a las condiciones meteorológicas que hemos mencionado. Se podrán activar incluso de día y pueden sustituirse por las de cruce si no se dispone de antiniebla delantero.

¿Sabes cuándo usar las luces antiniebla delanteras y traseras? ☁?☁
Con niebla ☁
Con lluvia ?
Con nieve ?
Con humo o polvo en el ambiente ? ?

Esta infografía te ayudará ?#ViajeSeguro #SeguridadVial pic.twitter.com/qquYZs88Sp

— Guardia Civil ?? (@guardiacivil) December 18, 2021

Para evitar cualquier duda al volante, te explicamos cómo utilizar correctamente las luces antiniebla de tu vehículo, tanto las delanteras como las traseras:

Luces antiniebla delanteras

• Se utilizan en condiciones que disminuyan sensiblemente la visibilidad, aislada o junto a las de corto y largo alcance.

• No es obligatoria y no la equipan todos los vehículos.

• También puede usarse de noche en carreteras estrechas (menos de 6,5 m. de ancho) con curvas sucesivas señalizadas.

• Mal utilizada puede deslumbrar de frente y se refleja en los retrovisores.

Luces antiniebla traseras

• Luz roja intensa, para hacer más visible el vehículo por detrás.

• Puede ser sólo una, a la izquierda o en el centro; o dos, en los bordes exteriores.

• Obligatoria para automóviles (excepto motocicletas), únicamente en condiciones desfavorables: con niebla espesa, lluvia muy intensa o fuerte nevada.

• Apáguela en retenciones o si la niebla desaparece para no deslumbrar a los conductores que van detrás.

Multa por uso incorrecto de las luces antiniebla

Todo lo que dice la normativa aplicable sobre la correcta utilización de la luz antiniebla trasera lo tendrán que cumplir los conductores en general. Sin embargo, lo que establece respecto a los antiniebla delanteros, solo lo tendremos que cumplir si nuestro vehículo tiene instalado este tipo de iluminación​. 

En el caso de no hacer un correcto uso de las luces antiniebla, puedes exponerte a una sanción económica de hasta 200 euros, que tendrá un importe reducido si se paga dentro de los plazos correspondientes que se indican en la propia sanción.

La misma multa nos la pondrán por no utilizar los antiniebla que por ponerlos cuando no se debe. El objetivo de este sistema de iluminación no es otro que hacer que nos vean. Apuntan más bajo y a menor distancia que el resto de luces, y esto es para que el haz de luz evite el rebote contra la niebla. En el caso del antiniebla trasero, la intensidad de la luz es mayor.

Por ello, si hacemos uso de este tipo de luces cuando no se cumplen las condiciones para su utilización, lo que conseguiremos es molestar al resto de usuarios de la vía con deslumbramientos que suponen un riesgo para la circulación y la seguridad.