¿Sabes cómo se lava la ropa de deporte? Apunta estos consejos

Tantos años haciendo la colada y todavía a día de hoy cometemos errores cuando ponemos la lavadora. ¿No meterías unas zapatillas llenas de barro con un delicado jersey de cashmere verdad? Pues lo mismo pasa con la ropa de deporte. Estas prendas necesitan un lavado especial separado del resto de piezas de ropa que metemos diariamente en el tambor de la lavadora. 

Trucos para lavar correctamente tu ropa deportiva

Lo primero de todo, especialmente si acabamos de comprar esa prenda de ropa, es fijarnos en las indicaciones de la etiqueta. Este tipo de tejidos suelen ser concretos para que puedan ajustarse a la movilidad que el cuerpo necesita a la hora de hacer ejercicio: elastano, poliamida, poliéster...

Nada más terminar de hacer deporte, lo ideal es lavarla de forma seguida. Pero como sabemos que eso no es posible si no tienes una cantidad de ropa suficiente para llenar la lavadora, lo mejor es dejarla colgada al aire hasta el momento en que lo hagamos.

Prohibido dejarla toda sudada durante días dentro de la bolsa de deporte ni tampoco en el cesto con el resto de la ropa sucia. Lo único que lograrás es que aumente el mal olor y las bacterias por ese exceso de humedad en esos lugares cerrados y donde no le da ni el aire ni la luz. Si lo que quieres es eliminar ese fuerte hedor, lo mejor es que la dejes en remojo durante unas horas en un barreño con agua tibia antes de meterla en la lavadora. 

El uso frecuente que le damos, la suciedad y, sobre todo, el sudor acumulado hacen que este tipo de piezas deportivas sufran lavados muy frecuentes. Pero debemos hacerlos con el detergente determinado para que cuide esas fibras y estrenemos ropa deportiva cada día que nos la pongamos. Si no lo hacemos, puede que estemos estropeando algunas de sus propiedades (impermeabilización, efecto polar...) o limitar la capacidad de absorción del sudor si, además, añadimos suavizante al lavado. 

Si tu lavadora es de última generación y dispone de un programa específico para la lavar ropa deportiva, úsalo. En caso contrario, mejor opta por un programa corto con agua que no exceda de los 40ºC y sin centrifugado.