3 propuestas y algún consejo para decorar y presentar tu mesa de Navidad

Son muchos los preparativos de estos días, sobre todo si te toca organizar una cena o comida de Navidad en casa, pero además de pensar en el mejor menú posible, la puesta “de largo” que elijas para tu mesa es la primera sorpresa que puedes dar a hijos, nietos o amigos con los que celebres estas fiestas.

Claves de una mesa de Navidad bonita y confortable

Opciones decorativas tienes todas las imaginables, pero independientemente del estilo que prefieras, siempre conviene recordar algunos consejos generales, que hay que tener en cuenta a la hora de montar esa mesa tan especial.

• Un truco que funciona para lograr que todos los comensales se sientan a gusto es preparar la mesa pensando no solo en una decoración fabulosa, sino en la comodidad. Calcula bien el espacio entre servicios, para que nadie tenga que comer con los codos pegados a los costados (si hace falta una mesa supletoria, no dudes en ponerla aunque el conjunto no quede tan “de revista”). Piensa además en los espacios necesarios para colocar las posibles fuentes con los alimentos, para que todos tengan fácil acceso. Que vengan a cenar tus nietos es una alegría, pero recuerda que con los más pequeños de la casa, las copas altas de cristal “peligran”.
• Una iluminación suficiente y agradable, también importa a la hora de crear un ambiente acogedor. Una lámpara de pie supletoria, o unas velas, que siempre quedan genial en una mesa navideña, son dos posibles ideas.

• No sobrecargues con excesivos adornos que resten espacio y además impidan la visión (y la charla) entre los que se sienten a la mesa. Como tendencia decorativa de estas navidades, se llevan los centro bajos o los detalles de poca altura que puedas colocar a lo largo de toda la superficie, por ejemplo, una hilera de ramas verdes de abeto o acebo (valen igual artificiales), unas espigas o ramas secas un vistoso espumillón, colocado longitudinalmente, a juego con los del árbol de Navidad…
• Busca un buen equilibrio. Es el gran secreto de cualquier presentación. No te empeñes en poner en sinfín de bonitos objetos todos a la vez, porque, al final, no destacará ninguno. Por ejemplo, si tienes un mantel maravilloso rebosante de colorido y toques dorados, elige una vajilla sobria. Si por el contrario, optas por un sencillo mantel blanco, haz que platos y cubiertos “brillen”.
• Un toque práctico. Es algo que no está reñido con una mesa fantástica. Prescindir de grandes textiles (que habrá que lavar y planchar), sustituyéndolos por unos bonitos bajo platos o por manteles individuales, que permitan dejar la mesa vista, o utilizar servilletas de papel (las hay muy bonitas y hechas con materiales reciclables) son dos posibilidades que ahorran tiempo y trabajo.

Tres estilos para que elijas el que prefieres para tu mesa de Navidad

Fíjate en estas sugerencias que pueden servirte de inspiración a la hora de crear el exclusivo diseño decorativo de tu mesa, única y siempre muy personal

En rojo y verde

Son los tonos más representativos de la Navidad, por lo que si los eliges como base para poner tu mesa, acertarás seguro. Procura encontrar un equilibrio entre ambos, para que ninguno sobresalga en exceso. Puedes aportar un toque alegre y festivo optando por una vajilla que combine piezas en blanco y rojo. Sobre un mantel en tono neutro (blanco, beige, gris), en el que no falten algunos adornos a base de las tradicionales ramas de abeto, quedará perfecta. El rojo y el verde también combinan genial en una mesa de madera a la que quieras dar cierto aire rústico. En este caso, unos manteles individuales y servilletas en rojo, junto a unas tradicionales piñas (de los pinos) que aporten un toque natural, conseguirán crear el conjunto perfecto. Si tu mesa no es de madera, un mantel en color terracota es ideal.

En dorado o plateado

Si hay unos días al año en los que vestir la mesa derrochando brillos no desentona, son estos. Platos con alguna filigrana en oro, servilleteros o reposa cubiertos en plata, unas velas bajas y anchas en alguno de los dos tonos, unas copas con el pie también en metálico… tienes multitud de opciones para una mesa deslumbrante. Poner en práctica esta idea implica tener una mesa con un toque festivo pero a la vez elegante y sofisticado. Si no quieres que el resultado final sea demasiado recargado y apuestas por un estilo moderno e innovador prueba a poner los distintos elementos sobre un fondo neutro y oscuro. Azul “noche” verde oscuro, gris cemento (perfecto para la plata) o incluso un negro total (sobre el que destacará el dorado) son buenas ideas para el mantel de la cena. Si se trata de una comida, no hay duda: escoge uno en blanco.

A todo color

Especialmente si vas a tener niños pequeños en la en la cena o comida de Navidad, atreverte con nuevas ideas que resulten tan innovadoras como divertidas está más que permitido. Un mantel con estampados o dibujos que recuerden la época en la que estamos (Papá Noel en su trineo, los Reyes Magos, un muñeco de nieve…) seguro que les encanta. Otra opción es sorprender con detalles decorativos en tonos poco habituales pero que pueden quedar muy bonitos como los malvas o los verdes turquesa. Una guirnalda central que incluya bolas del árbol de Navidad en esos mismos tonos, será toda una sorpresa y dará a tu mesa un toque tan alegre como decorativo.