¿Hay chinches en tu cama? Cómo identificarlas y eliminarlas

Hace décadas se creía que la presencia de chinches se debía a escasas condiciones de higiene y limpieza en una casa o habitación. Sin embargo, este no es siempre el principal motivo, pues si hay un sitio cálido y varios huecos donde puedan esconderse, este puede convertirse en su lugar habitual.

Una chinche es un pequeño insecto, de no más de 10 milímetros, de color marrón que pertenece a la familia de los pulgones y cuyos hábitos nocturnos le permiten moverse entre rincones de lo más insospechados. No solo en las camas, sino en todos los elementos que componen ese mueble, como el somier, las patas o el cabecero. Sin olvidar aquellos que están a su alrededor como, por ejemplo, la mesilla de noche o un banco, o bien en otras zonas de la casa menos conocidas. Es el caso de una pared donde haya papel pintado, bajo las alfombras o incluso dentro de una toma de luz.

¿Tienes chinches en tu cama?

Comprobar si hay chinches en el lugar en el que duermes no es tan complicado, pese a que estas sean diminutas y no las detectes a simple vista. Es muy sencillo, primero observa las sábanas y las mantas, donde podrás ver una especie de pieles vacías de color amarillento muy pálido. Esto es consecuencia de la muda que hacen las chinches durante su evolución a la edad adulta. Además, no es complicado que notes también pequeñas manchas de sangre debido a que, al acostarte, quizás hayas aplastado a alguno de estos insectos. 

Pero lo que de verdad te pondrá en alerta es echar un vistazo a tu piel, por ejemplo, al terminar de ducharte, para comprobar si el efecto de estos pequeños insectos ha causado la aparición de varias picaduras. Estas son rojas con una mancha más oscura en su interior, suelen formarse en grupo y, sobre todo, se dan en la zona del cuello, la cara, las manos y los brazos.

​Además de estas señales evidentes, puede que seas propenso a sufrir una reacción alérgica a las chinches. Es entonces cuando aparece un molesto picor que suele venir acompañado de ampollas más serias. Sin embargo, aunque pican en la piel y se alimentan de la sangre, no son insectos que causen enfermedades más graves. Es más un problema de salubridad que acompaña a esa afección cutánea.

Cuando esto se produce, siempre y cuando no sea algo leve y anecdótico, es importante que acudas al médico. Lo más probable es que este recomiende que sigas el mejor tratamiento en cada caso. Estas manchas suelen desaparecer sin problema al cabo de un par de semanas, pero puedes ayudar en tu recuperación con una crema que tenga hidrocortisona o tomar algún antihistamínico oral.

¿Cómo puedes deshacerte de ellas?​

Lo malo en estos casos es que las chinches no se quedan quietas en un mismo lugar durante mucho tiempo. Es por eso que pueden estar en tu cama, pero propagarse rápidamente a otros objetos, ropa de cama o incluso al pijama con el que duermes. Avanzan de forma muy rápida, por eso es importante actuar cuanto antes, con un servicio de desinfección profesional para acabar con ellas.

Antes de esto, no viene mal que uses algún tipo de repelente para insectos (por ejemplo, te pueden servir los que son eficaces contra garrapatas y mosquitos) y coloques una mosquitera en la cama donde duermes.

Antes de llamar a los profesionales, que emplearán productos químicos más agresivos, puedes probar primero con algunos de estos consejos prácticos: 

• Pasa la aspiradora a conciencia por todos los rincones, no solo de la cama sino de la habitación entera. 
• Todas las sábanas, mantas, colchas, edredones y fundas de almohadas deben ir directamente a la lavadora. Además, es bueno que luego toda la colada, también los pijamas, pase por la secadora, ya que las altas temperaturas terminarán por matar a las chinches. 
• Estos insectos y sus huevos pueden esconderse en los cestos donde se deposita la ropa sucia. Por eso, no te olvides de limpiarlos muy bien a continuación.
• Mantén aireado el cuarto durante bastante tiempo y, si puedes, no duermas en él hasta que consideres que ya es seguro.