Victoria Herrero
Cómo
Los repetidores domésticos de WiFi: te descubrimos qué son y cómo funcionan
Estos dispositivos se encargan de ampliar el alcance de la conexión de internet en tu casa
Se han convertido en parte indiscutible de muchos hogares, sobre todo si cuentan con conexión a internet. Nos referimos a los repetidores de WiFi, un dispositivo de red que se conecta a un enchufe y cuya función es ampliar el alcance de esa conexión de forma inalámbrica o por cable a varias estancias de la casa. Algo realmente útil en el caso de aquellos rincones de nuestra casa en los que la señal del router es más débil.
Estos aparatos pueden emplearse tanto para el interior como el exterior de tu vivienda, según la ubicación que quieras darle, y pueden clasificarse en función de la banda inalámbrica con la que se trabaje (desde 2.4 Ghz hasta 5Ghz) o su potencia para llegar a un mayor alcance.
Características, pros y contras de un repetidor WiFi
Lo mejor de todo es que su manejo no resulta para nada complicado, ya que basta con encenderlos y realizar una sincronización con el router que ya tenemos instalado en nuestra casa. Otra de sus ventajas es su económico precio. Puedes encontrar modelos de repetidores WiFi domésticos por menos de 100 euros con amplias prestaciones.
La única pega de este tipo de dispositivos electrónicos es que, pese a que su alcance es más amplio que un router convencional, tampoco es que sea ilimitado, por lo que lo mejor es evitar colocarlo a una distancia muy grande del lugar donde queremos disfrutar de internet con una buena calidad y velocidad de conexión.
Así, a la hora de ubicarlo en tu casa, asegúrate de que en ese punto se recibe una buena señal del router, para así poder ampliarla correctamente. Pero cuidado con emplear varios repetidores cercanos entre sí, ya que es posible que se produzcan interferencias entre ellos, con lo que el rendimiento de la banda de internet se verá afectada.
¿Cómo es su funcionamiento?
Este tipo de repetidores de señal WiFi están formados por dos enrutadores inalámbricos que son los responsables de su sencillo funcionamiento. Así, mientras uno de ellos se encarga de recoger esa señal de internet que ya tienes en tu casa, el segundo tiene la labor de (una vez recibida esa señal) transmitirla al resto de la casa con una mayor potencia y alcance.