4 pasos para que tus camisas te duren más tiempo y estén en perfecto estado cuando las uses

Las camisas son una de las prendas más utilizadas por los hombres, tanto para trabajar como para salir. Son un reflejo de buena presencia, estilo y elegancia. Por ello, es importante que siempre luzcan en buen estado, para lo cual es necesario cuidarlas correctamente tanto en el lavado, secado, planchado y, como no, en nuestros armarios.

1.- Lavado

A la hora de lavarlas es importante que siempre nos fijemos en las etiquetas para seguir las recomendaciones de los fabricantes.

Es preferible que no mezcles los colores. Siempre se recomienda lavar las que sean blancas por separado, así como diferenciar entre colores claros u oscuros.

Del mismo modo, se aconseja lavar las camisas siempre por separado, nunca con toallas o cualquier otro tipo de tejido grueso que pudiese dañarlas durante la colada.

La zona de los puños, el cuello y las axilas es la que más suele ensuciarse, por ello, te recomendamos que hagas especial hincapié en esa zona, incluso frotando un poco con el propio detergente si fuese necesario. En el caso de manchas difíciles, recuerda que hay multitud de trucos para acabar con ellas a base de bicarbonato de sodio o limón, entre otros.

Es muy importante que, tanto por el bien de tu lavadora como por el de las camisas, recuerdes siempre quitar las ballenas del cuello antes de lavarlas.

Para un correcto lavado, desabrocha todos los botones y ponla del revés.

2.- Secado

Respecto al secado, aunque hay secadoras que vienen con programas especiales para camisas, nuestro consejo es que las seques al aire. Para ello, siempre es aconsejable hacerlo directamente sobre una percha.

No las dejes secar durante días y evita el sol directo.

3.- Planchado

Para que resulte más sencillo, te recomendamos que las camisas no estén excesivamente secas. Si conservan un poco de humedad será más sencillo acabar con las arrugas.

Respecto a cómo se debe planchar una camisa, lo ideal es comenzar por el cuello, seguido de los puños, las mangas y finalmente el frente y la espalda. Recuerda que las mangas siempre deben ir sin raya.

4.- En el armario

En este punto es importante que prestes atención ya que, de lo contrario, todos los pasos anteriores no habrán servido de nada.

Para que nuestras camisas estén en perfecto estado el día que la queramos utilizar es importante que sigamos estos consejos:

• Siempre debemos guardarlas colgadas.
• Utiliza una percha específica para camisas.
• Abrocha los 3 primeros botones para que conserve su forma.
• Deja suficiente espacio entre una y otra para evitar que se arruguen.