María Francés
Practicopedia
10 consejos económicos para reducir la humedad en casa
María Francés
Foto: Big Stock
Martes 7 de diciembre de 2021
ACTUALIZADO : Viernes 10 de diciembre de 2021 a las 11:39 H
9 minutos
Con estos gestos cotidianos podremos eliminar gran cantidad de humedad
En plenos meses de frío y teniendo en cuenta la subida de los precios de la luz, muchas familias no pueden permitirse acciones como poner la calefacción para mantener la casa a una temperatura cálida.
Con todo, retirar la humedad es un factor que juega un papel muy importante a la hora de mantener un cierto confort térmico y además, evita el riesgo de alergias e infecciones respiratorias.
La Agencia de protección ambiental de Estados Unidos (EPA) recomienda un nivel de humedad entre el 30 y el 50 por ciento en el interior de la casa, en función de la temperatura exterior: más humedad cuanto más calor hace y menos cuanto más frío.
Estate muy atento y toma nota porque aquí te vamos a dejar varias soluciones para no arruinarte y poder reducir, por lo menos, gran parte de la sensación de frío.
1. Deshumificadores
Este remedio es ideal para los hogares que se encuentran en zonas costeras y aquí en España no son pocos, por lo que seguro que a más de uno le va a poder salvar los meses de invierno. Los deshumificadores se han convertido en un aliado más que puede combatir al frío que provoca la humedad. Los hay de distintas potencias y precios que puedan adaptarse al tamaño de las estancias del hogar que tengamos.
Por ejemplo, podemos adquirir deshumificadores más pequeños por 50 euros que nos pueden servir para quitar el frío del salón o del dormitorio para cuando empieza a caer la noche y bajan las temperaturas.
Por otra parte, los hay más grandes y potentes que rondan los 200 euros y los podemos encontrar en tiendas de electrodomésticos o grandes cadenas de supermercados como Leroy Merlín o Mediamarkt.
2. Usa absorbentes para armarios
Otra buena opción para eliminar la humedad de nuestros hogares, es a través de los absorbentes para armarios, que aunque parezca increíble, son lugares donde se acumula gran cantidad de humedad. En este sentido, son unos productos que actúan como secantes de la humedad para nuestras prendas de la ropa y contribuye a evitar el moho en los armarios y habitaciones pequeñas.
Los podemos encontrar en casi todos los supermercados conocidos a precios de entre 5 a 35 euros. Su uso es bien sencillo: se trata de colocar en las baldas de los armarios las bolsitas de absorbentes preparadas para eliminar la humedad de nuestras prendas.
3. Ventila las estancias
Un error muy grande que muchos cometemos es pensar que al abrir las ventanas, puede entrar más frío en nuestra casa, y es que esto no es del todo cierto, porque cuando abrimos para ventilar las estancias, estamos haciendo que entre el aire seco que se encuentra en el exterior, de manera que conseguimos quitar la humedad que se encuentra en el ambiente.
Lo ideal es que abramos las ventanas de todas las habitaciones de la casa al menos una vez al día durante 10 minutos. Y lo mejor de todo es que no nos va a costar ni un euro, porque abrir las ventanas es gratis y no nos cuesta nada hacerlo a diario.
4. Evita tender dentro de casa
A veces por pereza o porque se nos hace tarde y cae la noche, preferimos tender dentro de casa y estamos cometiendo un grave error. Dejar de hacer este hábito cotidiano nos puede ayudar a reducir la humedad de nuestros hogares y tampoco nos cuesta nada.
Cuando tendemos en el interior de nuestra casa, estamos alimentando la humedad en el ambiente, ya que las prendas de ropa mojadas emiten gramos de agua cuando se secan y todo eso se queda estancado en nuestro entorno.
La solución es bien sencilla y es tender fuera siempre que no esté lloviendo, por supuesto. En ese caso no nos quedará otro remedio que tener que usar tendederos portátiles dentro de casa.
5. Enciende la campana extractora
Si quieres conseguir retirar la humedad del todo, te recomendamos encender la campana extractora mientras estés cocinando para que el vapor del agua que desprenden los guisos, no invadan tu casa de un ambiente más cargado aún.
En el caso de que no dispongas de este electrodoméstico, puedes abrir las ventanas para hacer que los humos salgan hacia el exterior de la vivienda.
6. No abuses de plantas
Si eres un amante de las plantas, lamento decirte que esta no es una buena noticia para ti, ya que estas requieren de abundante agua para vivir y pueden contribuir a convertir nuestra casa en un ambiente más húmedo y frío.
Es cierto que dan mucha vida y decoran nuestros interiores, pero tampoco podemos convertir nuestro salón en una selva tropical porque esto puede enfriar nuestras estancias. La alternativa es comprar plantas que no necesiten mucha agua, como por ejemplos los cactus, aloe vera o las plantas sedum.
7. Instala un extractor de aire en el baño
En invierno solemos ducharnos con agua bastante caliente y eso hace que se genere gran cantidad de humedad en el ambiente. Para poder retirarla rápidamente, es recomendable que instalemos unos pequeños extractores en la pared de nuestro baño, que quitará el vapor para que no se disipe por el resto de la casa.
En cuanto al precio de este aparato y su instalación, nos puede costar más o menos unos 150 euros en total, ya que se trata de una instalación eléctrica y la mano de obra es imprescindible.
8. Pasa menos tiempo en la ducha
Justo ahora que hablábamos de que la humedad se genera mayoritariamente en las duchas con agua caliente, es importante que tengas en cuenta que cuanto menos tiempo tardes dentro de la ducha, menos vapor se formará en el interior de tu aseo.
Además, es conveniente que no pongas el agua tan caliente porque se generará más vaho y será mucho más difícil acabar con este problema.
9. Regula la temperatura de la calefacción
Cuando ponemos la calefacción en casa, tendemos a ponerla más alta de lo recomendable, lo cual hace que el ambiente se caldee y la diferencia entre la temperatura del interior y el exterior aumente. Por tanto, el aire del interior entrará en contacto con las superficies frías, favoreciendo la aparición de condensaciones.
10. Revisa la instalación de la fontanería
Las revisiones de las instalaciones de fontanería son necesarias cada cierto tiempo para evitar fugas y poder solucionarlo cuanto antes a manos de un experto. Estas pérdidas de agua pueden producir bolsas en la pared generando desconchones e incluso aparición de moho, además de un foco frío más de humedad.
El gasto en este sentido es bastante relativo, ya que si hay alguna fuga o problema mayor, será más caro el reparo de los daños, mientras que si se trata de una revisión rutinaria, podrá costarnos alrededor de uno 80 0 100 euros.