¿Cuál es la ciudad española más comprometida con el cambio climático?

No es ningún secreto que el cambio climático es una de las amenazas medioambientales más peligrosas a las que se enfrenta actualmente la especie humana. Sus consecuencias pueden ser devastadoras, siendo algunas de ellas ya visibles por el hombre como, por ejemplo, la subida del nivel del mar, el deshielo de las masas glaciares, la sequía y los fenómenos meteorológicos extremos.

Para acabar o, al menos, reducir parte de su impacto sobre el planeta, las asociaciones medioambientales y ecologistas alertan sobre la importancia de nuestra aportación, que podría hacerse palpable mediante una revolución energética por parte de la ciudadanía o una reducción de las emisiones de carbono, entre otras medidas.

En este sentido, Greenpeace (@greenpeace_esp) publica cada año una clasificación que deja en evidencia las ciudades más comprometidas con la causa y les incita a ser pioneras en la movilidad urbana sostenible. Bajo esta premisa, ¿cuál es la ciudad española que mejor combate el cambio climático?

Bilbao, la ciudad más comprometida

A través del Ranking de Movilidad Urbana desarrollado por Greenpeace este mismo año, descubrimos que Bilbao se encuentra a la cabeza en lo que a ciudades responsables y ecológicas se refiere. Este informe evalúa el grado de compromiso de doce ayuntamientos españoles y compara varios indicadores relacionados con el nivel de contaminación y ruido, la oferta de transporte público o la red de vías ciclistas y calles peatonales, entre otras.

Así, la capital vizcaína obtiene una puntuación de 6,9 y se alza como la mejor valorada en movilidad. Esta comparte podio con Valencia, que ha conseguido un 6,6, y Barcelona, con un 6,5. "Las tres ciudades destacan por una apuesta decidida por los modos sostenibles, con medidas de gran calado que están permitiendo reducir el uso del coche y mejorar la calidad de vida de su ciudadanía", exponen desde Greenpeace España.

Lamentablemente, en el otro extremo de la clasificación encontramos a Albacete, con una valoración de 3,7; Santiago de Compostela, con un 4,4; y Palma, con un 4,6. Además, Murcia y Pamplona también han sido penadas con un suspenso, pues el uso del coche sigue siendo mayoritario a pesar de las alarmas.

Mención especial reciben Sevilla y Madrid, ambas con un 5,9 y en una posición intermedia. "La ciudad andaluza destaca por sus buenos índices en los desplazamientos a pie y en bicicleta, mientras que Madrid ha lanzado buenas medidas como el Protocolo Anticontaminación o ‘Madrid Central’. Sin embargo, ambas ciudades requieren de otras acciones para reducir el uso del coche en su área metropolitana", añade Greenpeace. ¿Conseguiremos algún día convertirnos en un país responsable con el medio ambiente?