Ruth Macarrón
Gobiernos y particulares, cada vez más preocupados por reducir al máximo los residuos
Filosofía zero waste, como se conoce esta corriente, o basura cero, en castellano, es un movimiento que busca hacer nuestras vidas, casas y ciudades más sostenibles, reduciendo al máximo los residuos que producimos. Solo en España se producen cada año más de 111 millones de toneladas de basura, según datos de Ecoembres. Esta organización dedicada a cuidar del medio ambiente a través del reciclaje nos explica también que, de seguir así, en 2050 se necesitarán tres planetas tierra para mantener el ritmo de consumo actual.
La filosofía zero waste trata de volver a los orígenes, cuando las manzanas no se vendían en envases de plástico individuales y el jabón se elaboraba en casa con restos de aceite. Eliminar por completo los restos de nuestro cubo de basura parece una misión imposible en los tiempos en los que vivimos, pero con algunos pequeños cambios podremos ver la basura reducida drásticamente.
Cómo aplicar la filosofía 'zero waste' a nuestro día a día
La filosofía zero waste busca eliminar o reducir el consumo de envases de plástico, los más contaminantes. Trata de pensar cómo era hace 50 años, cuando llevábamos nuestra bolsa a la carnicería y no usábamos papel de cocina. Volver a utilizar trapos, servilletas de tela o pañuelos en lugar de kleenex reducirá bastante tu cubo de basura. No compres fruta o verdura envasada (si te interesa, hay una campaña en internet llamada Desnuda la fruta, que denuncia este tipo de consumo), y pásate al granel: cada vez es más fácil encontrar este tipo de establecimientos en todas las ciudades, donde encontrar desde legumbres o cereales a jabones y otros productos domésticos.
Eliminar las botellas de plástico de agua (piensa en que se consumen en un momento y sus residuos permanecen en la tierra durante muchos años) es un gesto sencillo y muy efectivo. Lleva siempre contigo una botella de cristal (las tienes recubiertas de silicona para hacerlas más resistentes) y, si te pilla sin ella, pasa a un bar a pedir un vaso de agua.
Esta filosofía no solo habla del consumo del plástico, también tiene como objetivo no desperdiciar comida (siempre se puede utilizar para hacer una cena de restos) o no tirar ropa (la industria de la moda rápida nos ha hecho olvidarnos de remendar los calcetines, por ejemplo).
En Reino Unido incluso hay restaurantes que se han apuntado a esta tendencia como Silo, en Brighton, un restaurante vegetariano que hasta elabora compost con los restos de comida de sus clientes. Aplicar la filosofía zero waste en casa no es tan complicado, y cada pequeño cambio es agradecido por todo el planeta.