Este es el plazo legal para realizar la devolución de una compra

Aunque la legislación española y comunitaria es clara, y determina los tiempos que tiene una persona que ha adquirido un bien para devolverlo por algún motivo, hay matices derivados de situaciones muy diversas. Las condiciones cambian según el lugar donde realices la compra, en una tienda física u online, dependiendo del tipo de producto del que se trate y también de la política de devoluciones que siga cada establecimiento.

¿Hasta cuándo puedo devolver algo que no quiero sin dar explicaciones?

Esta es la primera cuestión en la que hay que detenerse, porque es frecuente partir de una idea equivocada. El Real Decreto Legislativo 1/2007 (@boegob) por el que se aprueba el texto refundido de la Ley General para la Defensa de Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias no dice en ninguno de sus artículos que el consumidor pueda devolver un artículo y exigir recuperar su dinero porque no ha quedado satisfecho, tal como decía una conocida campaña publicitaria.

Como explica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU @consumidores) un comercio, en el que adquieras cualquier producto de manera presencial, no está obligado a devolverte tu dinero simplemente porque hayas cambiado de opinión. La devolución solo tendrá que ser aceptada, sin excusas, en dos casos:

1. Si el artículo presenta una tara o defecto, por ejemplo, una prenda de vestir en la que observes un evidente deterioro o un electrodoméstico que no funciona correctamente.
2. Si no se corresponde con lo anunciado. Imagina que te interesas por un producto expuesto y al comprarlo no te llevas exactamente ése, sino uno, supuestamente igual, ya empaquetado, pero al llegar a casa y abrir la caja no es lo que tú habías mirado previamente. 

Estos son los dos supuestos en los que podrías volver a la tienda y realizar la devolución.

Un detalle importante es que, aunque en la mayoría de los casos el vendedor optará por devolverte el dinero, también tiene la posibilidad de ofrecerte otras opciones, como reparar la posible avería de funcionamiento o hacerte un descuento. La Ley tampoco establece un plazo máximo en que puedas ejercer tu derecho de devolución en estos casos, aunque lógicamente, detectado el defecto cuanto antes intentes arreglar la situación, mejor.

Cada establecimiento físico tiene su propia política de devoluciones y como recuerda la OCU es básico conocerla antes de realizar cualquier compra, sobre todo si no estás completamente seguro de la misma. Una gran mayoría ofrece la posibilidad de devolver artículos en los 15 días siguientes a la compra para darle, así, más seguridad al cliente e incrementar sus ventas pero, insistimos, no están obligados a ello, con un matiz: si publicitan esta posibilidad, deberán cumplirla, porque de lo contrario podrías ejercer tu derecho de reclamación.

Con una simple pregunta tendrás toda la información que necesitas respecto a cualquier posible cambio o devolución aclarando cuestiones como si te devuelven el dinero aunque el producto no esté defectuoso, si en lugar de recuperar tu efectivo, te ofrecen vales para futuras compras, tiempos establecidos, etc.

¿Funciona igual en Internet?

En este caso, la Ley protege aún más a los consumidores, porque cualquier compra que no tenga lugar en una tienda física, por ejemplo, las que se realizan cada vez con mayor frecuencia a través de internet y también las ventas por catálogo, o por teléfono tienen un periodo de devolución, perfectamente determinado de 14 días.

Es lo que se denomina derecho de desistimiento, que, como explica el Centro Europeo del Consumidor en España (@eccspain) implica que cualquier consumidor que adquiera un producto a través de alguna de estas vías, puede devolverlo en ese periodo sin tener que dar la más mínima explicación y aunque el producto haya llegado en perfectas condiciones.

¿Existen excepciones para determinados artículos?

Tanto si has realizado la compra en un establecimiento físico como si lo has hecho a través de alguna web o plataforma de comercio electrónico, la Ley considera que en el caso de algunos productos la devolución no es posible ni podrías exigir el rembolso de tu dinero.

Ocurre por ejemplo con bienes personalizados o hechos a medida, con productos que se entregan precintados por razones de higiene o salud, con aquellos que se deterioran con gran rapidez como por ejemplo los alimentos o por también con aquellas grabaciones (programas informáticos, cds…) que hayan sido desprecintados.

Recuerda que para poder realizar cualquier devolución y en el caso de no llegar a un acuerdo con el comercio y querer hacer una reclamación, es indispensable presentar el tique o factura de compra, tanto en papel como electrónica.  Exigirla en el momento de la adquisición, es básico, entre otras cosas porque ahí figura la fecha de compra. Disponer de ella es el primer paso para, si no estás conforme, por algún motivo, con el producto adquirido, puedas ejercer tus derechos como consumidor.