Teresa Rey
Cuál
Qué son los tóner y en qué tipo de impresoras se utilizan
Estos dispositivos se emplean en las impresoras de tinta y tienen sus ventajas e inconvenientes
Los tóner son los dispositivos que utilizan las impresoras láser para la impresión sobre el papel. Si bien las impresoras de tinta emplean cartuchos, estos otros modelos necesitan esta variedad. El método de impresión que se utiliza en ambos casos es diferente, presentando ventajas o inconvenientes según el caso.
Pigmentos en polvo
Un tóner lo que hace es transferir un polvo que tiene en su interior con los pigmentos, en la parte posterior, al papel a través de una serie de descargas eléctricas. Ese contenido en polvo es lo que provoca que algunos fabricantes nos aconsejen mover el tóner vertical y horizontalmente antes de usarlo, para que no se quede apelmazado y la impresión responda a la calidad deseada.
Las cargas eléctricas son las que permiten ubicar las imágenes y texto en un punto de la página concreto. Las partículas del polvo por la acción del calor que generan la electricidad y los rodillos calientes, se quedan impregnadas en el papel.
En las impresoras de tinta el funcionamiento es diferente. El color se halla en una solución líquida que es la que se va soltando por medio de una boquilla que tienen los cartuchos y que se expulsa por el movimiento del cabezal de impresión de la máquina.
Rentabilidad
Los tóner suelen resultar a la larga más baratos si se efectúa una cantidad de impresiones importante. Realmente son más caros en cuanto al precio, pero se rentabilizan pues además suelen durar más que los cartuchos de tinta.
La calidad de impresión es muy buena, además de admitir impresiones de distintos tamaños y formatos. En general, las impresoras láser son también más rápidas. Por todas estas características suelen ser la opción más utilizada en las empresas.
Para el hogar es más recomendable tener una impresora láser solo de blanco y negro, si no vamos a necesitar hacer impresiones a color. Esto es así porque las máquinas láser de color suelen ser bastante grandes, ya que necesitan además del tóner para el negro, uno para cada tonalidad, es decir, un mínimo de otros tres más que cubran: cyan, magenta y amarillo. Al final, el coste es muy elevado en el caso del color si las impresiones no van a ser frecuentes, pues el precio de los tóner es superior al de los cartuchos, y puede que al final no lo rentabilicemos.