Estos son tus derechos ante los servicios de reparación en el hogar

Es una de las situaciones que, tarde o temprano, vivirás en tu casa. Se ha estropeado la lavadora, la nevera no enfría o hay humedades en el techo de una de las habitaciones. Es el momento de llamar a un especialista o a un técnico en reparaciones del hogar que ponga solución a esa inesperada molestia siempre y cuando sea de tal envergadura que no puedas echar mano de tu vena de "manitas".

La urgencia en muchas ocasiones por arreglar ese desperfecto puede llevarnos a no leer la letra pequeña de ese "contrato" de reparación o a no fijarnos en si lo que nos han cobrado entra dentro de lo normal o hemos sido víctima de un abuso. Para evitar este tipo de "sorpresas", lo mejor es que de antemano sepas los derechos que tienes como consumidor a la hora de llamar y hacer uso de estos servicios de reparación en el hogar. Y desde la Organización de Consumidores y Usuarios (@consumidores) nos dan algunas pistas clave en este sentido. 

Que no te engañen

Antes de decidirte por ese servicio de atención técnica, este está obligado a informarte y mostrarte toda la información relativa al precio de la mano de obra, los costes por desplazamiento, el horario en el que trabaja, la disponibilidad de un presupuesto previo para el consumidor, la disponibilidad de hojas de reclamación, así como la garantía (en meses) de esa reforma o reparación. 

Recuerda que además del coste de dicha reparación, de la mano de obra, de las piezas o de posibles traslados hasta tu domicilio, te pueden cobrar algún suplemento extra si les llamas en horario nocturno o es festivo. 

En ese presupuesto se indicará, entonces, el motivo de la reparación, si es necesario incluir piezas nuevas (cuidado no te sustituyan elementos sin que sea necesario), los pagos de cada concepto, así como la fecha de finalización de dicha reparación en tu hogar. Si esa avería requiere que dejes ese aparato en el establecimiento (por ejemplo, un televisor), es obligatorio que te den un resguardo que certifique que has depositado ese aparato en sus manos. 

Si por un casual el profesional acude a tu casa para comprobar el fallo y te indica un coste total para la reparación del mismo y no es de tu agrado, no estás en la obligación de asumir esa reforma con este servicio técnico. Solo tendrás que pagar el desplazamiento que hayas acordado al llamarle por teléfono. 

Además, una vez terminado el trabajo, el servicio de reparación debe entregar al usuario una factura donde aparezca desglosado todo lo que se ha cobrado y el trabajo realizado. En el caso de que observes detalles que no te cuadran, recuerda que la ley te protege. Así pues:

• Es importante que sepas que no te pueden realizar ni cobrar reparaciones o arreglos que no hayas autorizado previamente. 
• Si ves que hay algún problema, como recuerdan desde la OCU, pide las hojas de reclamaciones y solicita que te devuelvan todo lo que te han cobrado mal, ya sea interponiendo una denuncia por vía arbitral o judicial. 

¿Y si es una reparación de urgencia?

Estas mismas previsiones y recomendaciones también se aplican en casos de urgencia, por ejemplo si solicitas la ayuda de un cerrajero para entrar en casa ya que has perdido las llaves.

No te olvides también en este tipo de situaciones de contratar profesionales de confianza y con una acreditada trayectoria de profesionalidad (cuidado con las publicidades engañosas), antes de firmar nada pide un presupuesto previo (solicita varios entre varios técnicos de tu zona para comparar precios) y no des tu consentimiento si no estás satisfecho con lo que lees en ese documento. 

Toda precaución es poca si tenemos en cuenta que los españoles de media nos gastamos unos 180 euros cuando hacemos uso de un servicio externo para la reparación y mantenimiento de nuestro hogar; sobre todo en casos de reparación de la calefacción, arreglo de persianas rotas o un problema relacionado con la fontanería de nuestra vivienda. 

Fíjate en estos precios para hacerte una idea 

Aunque no es una ciencia exacta y todo dependerá del tipo de desperfecto o fallo, así como del servicio de cada especialista, estas son algunas tarifas orientativas para saber el precio de esas reparaciones: 

• Si hablamos de un problema de fontanería (algo muy frecuente en las casas), los precios oscilan entre los 50 euros por un grifo que gotea a los cerca de 150 euros si la reparación se refiere a una fuga en la tubería general.  
• El cerrajero te cobrará entre 15 euros por hacer una copia de tus llaves, 150 por reparar una cerradura o unos 100 euros si el problema es abrir una puerta cerrada con llave desde dentro. 
• ¿Y la electricidad de casa? Lo más sencillo y económico es cambiar un enchufe (unos 50 euros de media), pero hay averías más cuantiosas como reparar un cortocircuito (el doble) o efectuar la sustitución parcial de un cuadro eléctrico (más de 300 euros).