Si quieres instalar un toldo en casa estas son las recomendaciones a tener en cuenta

En verano hay que buscar las soluciones más acertadas para resguardar nuestra casa del calor. Y uno de esos remedios es instalar toldos en aquellas ventanas o terrazas más expuestas a la radiación solar.

Así, gracias a estas estructuras metálicas cubiertas con una lona podremos minimizar el impacto de ese calor sobre nuestro hogar. De esta manera, no solo ganaremos en confort en los días en los que se disparen las temperaturas, sino que reduciremos el gasto en aire acondicionado. 

Tipos de toldo, tejidos, precios...

El mundo del toldo es muy amplio. Así, deberemos decidirnos por el tipo de estructura que queremos para nuestra casa: de brazos fijos (los más comunes), articulado o sin brazos (más adecuado para proteger del sol patios interiores). A esto debemos sumar el tejido más acertado en cada caso. Así, las telas más empleadas son de poliéster (más económica, pero con peor resistencia), fibra acrílica (filtra un 80% de los rayos UV pero no es muy apta en caso de lluvia) o microperforada, muy aconsejada para terrazas ya que es capaz de filtrar casi la totalidad de esa radiación con amplias garantías de durabilidad y resistencia. 

El último paso es concretar la apertura y cierre del toldo. Podemos optar por el clásico sistema manual de toda la vida o, mucho más cómodo para las personas mayores, escoger un sistema monitorizado que haga esa función de forma automática. 

Según sea nuestra elección en todos estos factores deberemos contar con un presupuesto u otro; pero piensa que el precio, incluyendo la instalación, rondará los 600 euros aproximadamente. 

Recomendaciones antes de instalar un toldo

Antes de que un profesional acuda a tu casa para montar el toldo, es importante que no dejes al azar algunas cuestiones importantes para su colocación. Así, si vives en una comunidad de vecinos, es necesario solicitar permiso previo ya que supone una alteración del aspecto exterior del edificio en el que todos vivís. También si tu casa se encuentra en un edificio catalogado como histórico. Además, pregunta en tu ayuntamiento si necesitas algún tipo de licencia especial para hacer esta obra.

Solventados los problemas burocráticos, tampoco debes olvidarte de medir correctamente la longitud de ese espacio que quieres dotar de sombra y tener en cuenta su inclinación y su extensión una vez abierto del todo. Cuestiones todas ellas importantes para asegurar una fijación correcta y segura del mismo. Así evitaremos desastres como una caída por causa del viento, por ejemplo. 

Una vez instalado, este es el mantenimiento que precisa

Cuando ya tengamos nuestro toldo perfectamente colocado, lo mejor es invertir tiempo en su mantenimiento para alargar la vida útil del mismo:

• Si no se está usando (por ejemplo, durante el invierno o en caso de lluvia, nieve o viento) lo mejor es recogerlo. Y cuando lo hagamos, mejor seco para que no acumule humedad y pueda aparecer moho. 
• Cada cierto tiempo no viene mal limpiarlo con un jabón neutro y un cepillo; además de comprobar el mecanismo de apertura, sobre todo si es manual, para que no se oxide.