Algunas personas ven una especie de cuerpos flotantes o moscas volantes que aparecen de repente y ocasionalmente, suspendidas en el campo visual. Al mirarlas fijamente, desaparecen, pero mueves los ojos y ahí están otra vez. Este fenómeno también recibe el nombre de miodesopsias y se suele dar, sobre todo, en personas mayores.
¿Por qué aparecen? Los expertos afirman que las moscas volantes, habitualmente, acostumbran a ser una consecuencia de la deshidratación natural del vítreo. Están formadas por un conglomerado de la sustancia gelatinosa transparente presente en el interior del ojo y que se llama vítreo y que, con el paso de la luz, proyectan su sombra sobre la retina. Por lo tanto, las manchas negras que vemos son las sombras de estos conglomerados proyectadas en la retina y no se corresponden con objetos externos reales.
Asimismo, desde Quirónsalud aseguran que la edad es un factor que influye en el desarrollo de las miodesopsias. A medida que envejecemos, el vítreo comienza a espesarse o encogerse y puede desprenderse de repente de la parte posterior del ojo. Esto se denomina desprendimiento vítreo posterior agudo y las moscas suelen aparecer después del mismo. Eso sí, aunque constituyen una gran parte de las consultas en oftalmología, en la mayoría de los casos, no se trata de una patología grave ni existe un riesgo inminente si se ven de hace años. Además, suelen disminuir o desaparecer gradualmente.
Las posibilidades de la aparición de moscas volantes aumentan en los siguientes casos:
Si te has sometido a una cirugía de cataratas o realizado una limpieza de la cápsula posterior con láser.
Si padeces inflamación en el interior del ojo.
¿Y los destellos?
En cuanto a los destellos, los oftalmólogos del OMIQ indican que son luces parpadeantes en el campo de visión que se producen cuando el vítreo tiene tracción o se desprende la retina. Se pueden ver durante meses y, al igual que con las moscas volantes, con el envejecimiento es habitual ver destellos ocasionalmente.
¿Cuándo acudir al oftalmólogo?
En la mayoría de los casos, unas moscas volantes crónicas (es decir que se ven desde hace años) no deben ser motivo de preocupación, sin embargo, los oftalmólogos señalan que, en determinadas ocasiones, podrían ser indicio de una patología más grave:
Inicio de destellos repentinos asociados a moscas nuevas.
Con la aparición repentina de nuevas manchas.
Cuando se produce pérdida de visión periférica.
Cuando vemos más moscas volantes de lo habitual.
Cuando los destellos son especialmente fuertes y numerosos.
Si aparece una sombra en la visión periférica (lateral).
Si una cortina gris cubre parte de la visión.
En estos casos, las moscas volantes y estos destellos pueden ser síntoma de un desgarro o desprendimiento de retina, que se produce cuando la retina se separa de la parte posterior del ojo. Esta patología se trata de una enfermedad grave que debe tratarse de forma urgente.
Sobre el autor:
Marta Vicente
Marta Vicente Carmona es Graduada en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos y Máster de Marketing Digital y en Edición y Postproducción Digital. Es redactora especializada en temas de sociedad y salud y tiene experiencia como Community Manager.