Victoria Herrero
Practicopedia
¿Enganchado a tu móvil? Sigue estos trucos para reducir tu dependencia
Victoria Herrero
Foto: Bigstock
Miércoles 19 de febrero de 2020
ACTUALIZADO : Miércoles 19 de febrero de 2020 a las 6:44 H
3 minutos
Desactiva las notificaciones, sobre todo por la noche, y de vez en cuando déjalo en casa
Hazte algunas de estas preguntas: ¿Todos los días miras varias veces el móvil? ¿Tu familia y amigos se quejan de tu dependencia al smartphone? ¿Si no tienes batería o te has dejado el móvil en casa sientes ansiedad? ¿Lo primero que haces nada más levantarte o antes de dormir es consultar tu móvil? Si has respondido afirmativamente a todas estas cuestiones puede que estés un poco "enganchado al móvil". Formas parte de ese 94% de españoles que, según un estudio del Instituto Sondea, reconocen estar mucho tiempo mirando estas pantallas.
No decimos que tengas una adicción más grave que deba ser controlada y solventada con ayuda profesional, sino que es una forma de darte cuenta de la cantidad de tiempo que pasas con el cabeza para abajo consultando las notificaciones de tu teléfono o mirando tus redes sociales.
Si crees que ha llegado el momento de desconectar un poco de tu dependencia al móvil, estos sencillos consejos pueden ayudarte a conseguirlo.
Desactiva las notificaciones
Libera a tu móvil del constante sonido cada vez que te ha llegado un email al correo, alguien te ha hecho un comentario en tu perfil de Facebook o te han escrito en un grupo de WhatsApp. Salvo ciertas circunstancias, a ciertas horas del día o los fines de semana lo mejor es que solo tengas activados aquellos avisos importantes o que correspondan a llamadas.
Y por la noche no duermas con el móvil a escasos centímetros. Lo mejor es dejarlo en el salón o en otra estancia de la casa para que no te molesten estas notificaciones y puedas descansar tranquilamente.
Olvídate algunas horas del móvil
Este truco es muy sencillo y barato. Sal a dar un paseo por un parque cerca de tu casa para desconectar, queda con un amigo para tomar un café y charlar personalmente y no a través de mensajería online o vete al cine. Actividades muy sanas todas ellas y para las que no necesitas móvil alguno. El teléfono se queda en casa durante esos ratos de desconexión. Antes de que existiesen los móviles, salíamos a la calle sin estar tan "localizables" y nunca pasó nada.
Y, por supuesto, olvídate de tener el móvil encendido encima de la mesa cuando estés comiendo.
¿No sería mejor llamar por teléfono?
Ni sabemos la cantidad de mensajes instantáneos que podemos mandar al cabo de una semana con el móvil. Si necesitas comunicarte para trasladar un mensaje corto (por ejemplo, recordarle a tu pareja la lista de la compra) no pasa nada por usar este servicio, que además es muy útil.
En cambio, para saber de una persona, mantener el contacto con ella o entablar una conversación, lo mejor es llamarla por teléfono si vive lejos o bien quedar con ella y dar un agradable paseo mientras os ponéis al día de cómo ha ido vuestra vida.