Elisa Leiva
Practicopedia
¿Es recomendable usar agua del grifo para planchar?
Si el agua del grifo es muy dura, se recomienda mezclarla con agua desmineralizada o destilada
El tipo de agua que usamos en nuestra plancha de vapor es muy relevante porque, de no ser el adecuado, podríamos estar estropeandola. El detalle es importante porque la composición del agua puede llegar a provocar depósitos de cal o corrosión del metal. Entonces, ¿qué agua es mejor para usar en la plancha: agua del grifo, o destilada o desmineralizada?
El agua destilada y el agua desmineralizada son las más recomendables para usar en la plancha, porque están libres de sales. Ambas se distinguen entre sí por la forma en que se obtienen. Para conseguir agua destilada, es necesario hervir el agua primero para recoger el vapor de agua generado; mientras que en el agua desmineralizada se eliminan todas sus sales minerales mediante un tratamiento químico. Su precio es parecido, y oscila entre los 0,50 y 3,00 euros por litro aproximadamente.
A diferencia de ellas, el agua del grifo es muy dura, conteniendo gran cantidad de sales de calcio y magnesio que se suelen depositar en el interior de los electrodomésticos y causar averías. Es posible consultar el nivel de dureza en la web de tu ayuntamiento o compañía e aguas, o en el mapa de dureza.
Aunque estés utilizando un descalcificador para tratar el agua del grifo, es probable que este dispositivo añada ciertas sales al agua. Esto, combinado con las altas temperaturas de una plancha o un centro de vapor, podría generar problemas como la obstrucción o el daño de los aparatos. Además, dependiendo del tipo de sal que se use en el descalcificador, el agua tratada podría adquirir un tono blanco o marrón, lo que a su vez podría manchar la ropa.
Por otro lado, una ventaja importante de optar por el agua del grifo es su costo significativamente más bajo, con un precio medio de alrededor de 0,0017 euros por litro en España, según el último estudio de OCU acerca de los precios del agua.
Para evitar los depósitos de cal, lo más aconsejable es usar agua destilada o desmineralizada; pero el problema reside en que estas dos aguas pueden volverse ácidas rápidamente y corroer las piezas de hierro. Por este motivo, la mejor solución es, o bien usar agua del grifo cuando no sea excesivamente dura; o bien, en el caso de que esta tenga mucha cal o dureza, mezclarla con agua destilada o desmineralizada para obtener un agua más blanda. Los fabricantes desaconsejan usar únicamente agua destilada o desmineralizada.
Es muy recomendable llevar a cabo un mantenimiento regular, con el fin de revisar el estado de nuestra plancha. Además, limpiar periódicamente la suela de la plancha caliente con un paño húmedo nos ayuda a evitar manchas en la ropa