Toni Esteve
Practicopedia
Esta es la respuesta con la que activas a los bomberos en accidentes de tráfico
Su movilización viene determinada por la pregunta que desde 112 Emergencias se hace a quien alerta
La intervención de los bomberos en un accidente de tráfico se activa por la pregunta “hay alguna persona atrapada” que desde 112 Emergencias (@Emergencias112) se realiza al “alertante” (la persona que avisa del accidente). Si la respuesta es afirmativa la movilización de recursos es completa:
• Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (Guardia Civil de Tráfico o Policía Local)
• Servicios de Emergencias Sanitarias
• Servicios de Rescate (Bomberos)
• Otros en función del tipo de accidente
Desde la Asociación Profesional de Rescate en Accidentes de Tráfico (APRAT @APRATSPAIN1) y la Dirección General de Tráfico (DGT @DGTes) consideran que, como norma general, la persona que llama al 112 Emergencias no reconoce o no tiene conocimiento de qué es una persona atrapada, ni desde el propio 112 Emergencias se le facilita el entendimiento de este. Pero el conocimiento y valoración del nivel de atrapamiento es vital, ya que determinará la movilización correcta de los Servicios de Emergencias al lugar del accidente: “Se considera persona atrapada toda aquella que por motivo del accidente no puede salir del coche por su propio pie, debido a las condiciones finales del vehículo y/o por las lesiones sufridas en el impacto”.
La determinación del Nivel de Atrapamiento en el lugar del rescate se debe definir y confirmar lo antes posible. A nivel profesional técnico, se definen más concretamente 3 niveles de atrapamiento:
-
Mecánico: la persona que ha sufrido el accidente no puede salir por motivos estructurales del vehículo (bloqueo de puertas y/o salidas naturales).
-
Físico 1: a consecuencia de las lesiones ocasionadas la persona que ha sufrido el accidente no puede salir del vehículo por su propio pie (posibles fracturas, dolores de espalda y/o cuello…).
- Físico 2: la deformidad estructural del vehículo tras el accidente ha atrapado a la persona en alguno de sus miembros (pies, piernas, brazos…) impidiendo su salida. En esta categoría se incluye el denominado “atrapamiento exterior”, como resultado final del accidente con el propio vehículo implicado (por ejemplo, atropello en el que la víctima queda debajo del vehículo) como con cualquier otro tipo de objetos presente en el momento del accidente que atrape a la persona (quitamiedos, farola, árbol…). En los atrapamientos del tipo Fisico 2, no se recomienda la liberación de la víctima sin estar presentes los servicios sanitarios para dar su autorización, ya que se desconoce la evolución clínica de la víctima post liberación.
Extracción de las víctimas
El conocimiento y valoración del nivel de atrapamiento determinará la movilización correcta de los Servicios de Emergencias al lugar del accidente. En los accidentes de tráfico donde existan víctimas con Nivel de Atrapamiento Mecánico y Físico 2 se suele realizar la movilización de Servicios de Rescate (Bomberos) debido a que su reconocimiento es más detectable por personal no experto. El problema reside en los accidentes de tráfico con Nivel de Atrapamiento Físico 1, donde por norma general, no se reconoce, y la inmovilización y posterior extracción de la víctima se realiza sin la presencia de Bomberos a consecuencia de su no identificación en el momento del aviso de la persona que alerta.
Sólo en caso necesario de ayuda en la extracción de la víctima del vehículo se moviliza a los bomberos a petición de los recursos de emergencia inicialmente movilizados. Únicamente en un caso de riesgo inminente para la víctima se permite su extracción con la correspondiente ubicación posterior de la víctima en una zona segura hasta la llegada de Bomberos o Sanitarios, que realizarán una valoración primaria o asistencia sanitaria completa respectivamente.
Hay que tener en cuenta que los refuerzos estructurales adaptados al impacto de los vehículos más modernos enmascaran lesiones importantes del accidentado, lo que hace imprescindible una valoración sanitaria de la víctima in situ sin dejar que se ejecute su extracción a excepción de lo comentado anteriormente. También debemos ser conscientes de la falsa seguridad que existe en el escenario final del accidente, debido a riesgos no evidentes asociados al accidente en el lugar; como por la inestabilidad de los vehículos, los dispositivos air-bag no activados/desplegados, rotura de vidrios y aristas cortantes, entre otros.