Estos son los errores más comunes al preparar café en casa

La taza de café de la mañana es el primer paso de la rutina de muchas personas. Nada más despertar, nos preparamos esta sabrosa bebida para empezar nuestro día con la energía necesaria para afrontar toda la jornada que tenemos por delante.

Muchas veces el café no va solo, pues en algunas ocasiones lo acompañamos de un bocadillo, de una galleta o de unos churros. Además, tenemos muchas formas de tomarlo, pues algunos preferimos un café espresso, otros con leche, otros cortado y otros con crema.

El café se ha vuelto un ritual de todas las mañanas y siempre buscamos la mejor forma de prepararlo para lograr el sabor que queremos. Muchas veces lo preparamos sin saber que estamos cayendo en ciertos errores.

Es importante destacar que, según el último informe de los “Hábitos de consumo de café en España”, realizado por Café & Te, el 63% de los españoles mayores de 15 años declara tomar por lo menos una taza de café al día.

En estos tiempos es muy común ver que muchos hogares tengan una cafetera para disfrutar de esta bebida todas las mañanas. Sin embargo, muchas veces se cometen ciertos fallos al momento de la preparación, que hacen que el sabor no sea el ideal.

Yassir Rais, CEO de Syra Coffee, ha explicado las claves para un buen consumo y los errores que se suelen cometer a diario. Destaca que el principal error es al momento de la elección de la materia prima, e indica que la mejor lleva el sello del café de especialidad. Este sello indica que los granos han sido puntuados con más de 80 puntos en la escala de control de calidad de la Speciality Coffee Association.

“Para alcanzar esta puntuación, que tiene en cuenta todas las características del café, como acidez, dulzor, cuerpo, balance o las fragancias, hay que cuidar el producto en cada fase de su desarrollo”, indica.

Tras la selección de la materia, es muy importante molerlo en el momento para poder disfrutar al máximo de las bondades del café. Además, es importante tener en cuenta el agua en el momento de prepararlo: los expertos recomiendan que por cada 10 gramos de café molido se utilicen 150 mililitros de agua caliente.

Finalmente, es recomendable guardar el café en un recipiente hermético, en un lugar fresco, seco y protegido de la luz. En caso queramos conservar el café a largo plazo, es importante congelarlo también en un recipiente hermético.