El truco infalible para fregar el suelo y dejarlo reluciente

De nada sirve tratar de limpiar una superficie si los utensilios con los que lo vamos a hacer están sucios. Lo único que conseguiremos es empeorarlo. Esto sirve tanto para bayetas, escobas, como para la fregona. En este último caso, si no la limpiamos o cambiamos con frecuencia estaremos esparciendo suciedad y gérmenes por toda la casa.

La tiktoker '@tanyahomeinspo' es popular en la plataforma por compartir trucos y consejos prácticos de limpieza y orden en el hogar. En concreto, recientemente ha revelado su secreto para fregar el suelo y conseguir dejarlo reluciente.

@tanyahomeinspo

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♬ Dami Duro - Davido

El método es muy sencillo. Consiste en colocar un recipiente dentro del cubo y llenarlo con recipiente y agua hirviendo. Ahí tienes que empapar la fregona y, después de fregar el suelo, la escurres. De esta forma, solo usas el agua limpia y así conseguimos que el suelo no se vuelva a contaminar con el líquido ya utilizado.

Igualmente, puedes rellenar el pequeño recipiente con agua limpia y jabón y añadir un poco de vinagre o lejía para desinfectarla también. Gira el palo entre las manos rápidamente para que la fregona suelte la suciedad (como si fueras a hacer fuego), déjala 30 minutos y repite el movimiento. Recuerda que es importante que se seque correctamente para que no genere mal olor. Para un secado correcto evita introducirla dentro del cubo y cuélgala en un gancho de pared preferiblemente para que esté al aire.

Respecto al cubo, puedes lavarlo con agua y jabón o cualquier desinfectante.

Más consejos útiles

Para mantener la casa limpia y con buen olor, debes tener en cuenta otros aspectos además de limpiar bien los utensilios.

En primer lugar, aunque creas que puede volver a entrar el polvo o el buen olor del producto que utilizamos puede irse por la ventana: es importante que ventiles cuando friegues el suelo. De esta manera, además de secarse antes, evitarás que ese buen olor del producto se concentre y acabe por generar malos olores.

Después, limpia la fregona, pero recuerda que debes retirar el polvo de la superficie antes de pasarla, ya que de lo contrario solo estarás humedeciendo esa suciedad y moviéndola hacia otro lado.

Asimismo, cabe señalar que para fregar el suelo puedes optar por diferentes productos según el tipo de superficie que tengas, ya que no será lo mismo un parqué que un suelo cerámico. En cualquier caso, siempre puedes elegir un producto que aporte olor a limpio. Si lo prefieres, puedes utilizar tu propio gel de baño, ya que tienen un PH neutro y para los suelos delicados puede ser una buena alternativa.

Si notas que a pesar de limpiar correctamente el suelo persiste un olor desagradable, toma nota de estos consejos:

• Lava cortinas, tapicería y cubos de basura.
• No guardes en los armarios ropa que no esté del todo seca.
• Deja las zapatillas de deporte fuera del armario y, si por espacio no puedes, aplica polvos de talco en su interior.
• Colocar en los armarios bolsitas de flores o hierbas aromáticas como la lavanda, también te ayudará a conseguir tu objetivo.
• En la cocina, revisa la goma de la puerta de la lavadora y también el cajón donde añades el jabón y el suavizante, porque en estos puntos se puede acumular suciedad. El filtro del lavavajillas es otro de los lugares donde puede permanecer sin que te des cuenta y no olvides cambiar el filtro de la campana extractora con frecuencia. 
• Renueva también aquellos instrumentos que utilizas en la limpieza diaria, sobre todo los que se usan estando húmedos o mojados como bayetas, trapos, estropajos o fregonas porque a veces son ellos la fuente de ese mal olor.
• En el baño, diluye unas gotas de aceite esencial de árbol de té en viagre blanco y rocía toda la superficie. Es un producto natural muy eficaz para desodorizar esta parte de la casa.
• En general, el bicabornato y el vinagre blanco son dos grandes aliado para eliminar los malos olores. Para eliminar los olores a humedad en general de alfombras, tapetes y tapizados, llena un plato con vinagre blanco destilado y déjalo en la habitación hasta que el olor se disipe. Si se trata del sofá, puedes lavar sus fundas en caso de que sea desmontable o bien hacer una limpieza en seco. En ese caso, espolvorea bicarbonato y flores secas de lavanda y tomillo sobre el sofá. Déjalo actuar durante toda la noche y por la mañana pasa el aspirador para retirar el bicarbonato y las flores secas.