Manuela Martín
Practicopedia
Elimina las huellas de sudor de las sandalias con bicarbonato
Manuela Martín
Foto: Bigstock
Domingo 3 de julio de 2022
ACTUALIZADO : Domingo 3 de julio de 2022 a las 10:08 H
3 minutos
Luce unas sandalias perfectas este verano limpiándolas con estos trucos
En verano utilizamos sandalias principalmente ya que son mucho más frescas para nuestros pies. Sin embargo, aunque pensemos que con ellas nos sudarán menos los pies, también lo hacen y, en algunos casos, nos dejan unas antiestéticas huellas. En este artículo hemos recopilado algunos trucos para eliminar fácilmente las huellas de sudor de tus sandalias.
La mayoría de las sandalias las limpiaremos fácilmente con una mezcla de bicarbonato de sodio y agua tibia salada. Frotaremos con ayuda de un cepillo de dientes y finalmente, enjuagaremos con un trapo limpio con agua para quitar los restos de bicarbonato.
Para aquellas sandalias más delicadas o cuya mancha no haya salido a la primera con este truco, existen otras opciones que te detallamos a continuación.
Sandalias de tela y lona
Para quitar las huellas del calzado con este tipo de material prepararemos una pasta a base de bicarbonato de sodio y vinagre blanco.
Con un cepillo de dientes viejo aplicaremos la pasta sobre el calzado.
Finalmente, las enjuagaremos con agua fría y las dejaremos secar al aire libre en un lugar donde no de el sol directamente.
Sandalias de gamuza
Cogeremos un poco de algodón y lo mojaremos con alcohol de limpieza (alcohol isopropílico) para frotar sobre las zonas donde haya huellas. A continuación, lijaremos la zona con un poco de papel de lija y ¡listo!
Sandalias de cuero o piel
Sin duda, son las más delicadas de limpiar, algo que solo podremos hacer si el cuero es tratado. Para comprobarlo, echaremos una gota de agua sobre la sandalia y, si resbala, es cuero tratado y podremos limpiarla siguiendo estos consejos. De lo contrario, tendrás que llevarla a un sitio especializado para que las limpien.
En el caso de que podamos limpiarla nosotros cogeremos un trapo y lo mojaremos en vinagre blanco y frotaremos la superficie.
Finalmente, las dejaremos secar bien antes de ponérnoslas de nuevo.
Sandalias de goma
Mientras que las de cuero son las más complicadas, estas son las más sencillas. Para una limpieza correcta, te recomendamos que utilices bicarbonato de sodio.
Para su uso, crea una pasta a base de bicarbonato y agua y frota con ayuda de un cepillo de dientes.
El bicarbonato, además de limpiar y blanquear la sandalia, acabará con los malos olores.
Sandalias de corcho
Para su limpieza nos bastará con un paño húmedo y frotar la superficie manchada.
Con estos trucos esperamos que tus sandalias queden en perfecto estado para que puedas disfrutarlas y lucirlas durante todo el verano.