Mariola Báez
Practicopedia
¿Cuándo debes llevar a tu mascota a la consulta de un etólogo?
Fobias, agresividad… Los animales también tienen trastornos de conducta que requieren atención
La Etología Clínica es una especialidad dentro de la Veterinaria que se centra en la investigación, la prevención y el tratamiento de los problemas de comportamiento que pueden presentar los animales, tal y como detalla el Servicio de Etología de la Universidad Complutense de Madrid (@unicomplutense).
Ayudar a los propietarios a solucionar los problemas que pueden presentar perros, gatos, aves o caballos, entre otros animales, es el objetivo de este servicio, que además pretende colaborar en el intento de acabar con el abandono y el maltrato animal que, en ocasiones, puede tener su origen en una conducta anómala o no comprendida.
¿En qué casos debes acudir a un etólogo?
La función del etólogo sigue siendo poco conocida, pese a que el interés por comprender el comportamiento de los animales no es algo nuevo. Son muchos los científicos que han centrado sus estudios en este campo, entre ellos el médico austriaco Konrad Lorenz, considerado uno de los padres de la Etología. Actualmente, muchos veterinarios son también etólogos, al igual que otros profesionales que se dedican al adiestramiento o entrenamiento canino.
Si entramos en materia, esta especialidad parte de un primer diagnóstico, cuando el propietario de una mascota acude en busca de ayuda ante un problema para el que no encuentra solución.
Un gato que huye despavorido y se esconde cuando ve a alguien que no conoce o directamente ataca; un perro que lo pasa realmente mal cuando hay tormenta o si escucha petardos; una mascota que sufre lo indecible cuando la dejamos sola en casa; un perro que llega a dar miedo por su evidente agresividad en momentos puntuales… Estos son solo algunos motivos de consulta habitual con un etólogo, que tendrá que estudiar cada caso para encontrar los motivos que desencadenan ese comportamiento que hace difícil la convivencia con la mascota.
El etólogo puede indicar la necesidad de acudir al veterinario porque sospeche que puede haber una enfermedad no diagnosticada tras esa conducta y también puede suceder al contrario, es decir, que sea el médico quien te dirija a un etólogo al no encontrar causa física que justifique la actitud del animal.
En consulta, tras un estudio completo de la conducta y de las manifestaciones que esta provoca, el etólogo te indicará las pautas a seguir, basadas en los principios del aprendizaje, que logren modificar el comportamiento. En muchos casos, también suele indicar la necesidad de acudir a un adiestrador profesional que ayude, en la práctica, a que las técnicas y pautas marcadas se cumplan.