Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorJueves 15 de septiembre de 2022
ACTUALIZADO : Jueves 15 de septiembre de 2022 a las 18:04 H
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Los táperes de cristal son cada día más populares y van ganando terreno a las clásica cajas de plástico. En general son los más sanos, pero esto no quiere decir que los de plástico sean malos, todo dependerá del uso que se les vaya a dar.
Algunas pros y contras en el uso de los táperes los encontramos en que los de plástico son más fáciles de transportar y manejar, ya que son más ligeros que los de cristal, pero en contra el rango de temperatura que soportan es muy inferior, además, los de cristal aguantan mucho mejor la congelación.
Para que los táperes de cristal no sean tóxicos en su fabricación se utiliza vidrio borosilicato, el mismo que en los materiales de laboratorio, y entre sus ventajas se puede destacar que aguantan temperaturas superiores a 300 ºC e inferiores a -40ºC. Además, no se deforman con las altas temperaturas del lavavajillas, ni se manchan con los alimentos con gran pigmento, como, por ejemplo, la salsa de tomate. No se estropean con los productos químicos de limpieza, o los ácidos de algunos alimentos que, en el caso de las cajas de plástico, aunque no se vea a simple vista, pueden deteriorar las paredes del plástico.
Otras de las ventajas de los táperes de cristal es que en ellos no se forman surcos ni rugosidades donde puede quedar humedad o restos de comida difícil de limpiar y que acaban fermentando, como ocurre en los envases de plástico, y cogiendo mal olor debido a la putrescina y cadaverina, unos líquidos incoloros que desprenden un olor fétido debido a la descomposición y degradación de las proteínas de un alimento. El cristal no se impregna de olor crónico. También podemos destacar que conservan mucho mejor el sabor de los alimentos.
Hay que tener en cuenta que el cristal es un material natural, mientras que el plástico, a pesar de que se puede reciclar y utilizar en la fabricación de otros objetos, no es biodegradable y puede tener un gran impacto en el medioambiente en forma de microplásticos.
Visto todo ello, el uso de táperes de cristal tiene más beneficios tanto en el aspecto gastronómico como en el medioambiental.
No obstante, si optamos por utilizar los de plástico hay que tener en cuenta unos aspectos importante sobre su manipulación y modo de conservar los alimentos. Hay diferentes tipos de táperes y por eso es importante prestar atención al etiquetado o a los iconos que cada fabricante imprime en ellos: