La moda siempre vuelve. Seguro que recuerdas algún momento que dijiste horrorizado “¿en qué momento me puse eso?” y lo has vuelto a llevar años después. De las mujeres se han heredado las gigantes gafas de sol, las perlas, los zapatos elegantes y todo tipo de prendas de vestir. Este año promete recuperar más tendencias del pasado. Así que, mujeres mayores, será mejor que estéis atentas porque vuestros armarios pueden sufrir un asalto.
Lyst, el mayor buscador de artículos de moda del mundo, ha catalogado como ‘Yaya chic’ al nuevo fenómeno de moda de la temporada primavera-verano. El armario de las mayores es el gran protagonista: el ganchillo estará por todas partes.
El crochet, tejido también conocido como ganchillo, lo asociamos a las mujeres mayores que tejen prendas con este material. Se hizo famoso en la época hippie de los años 60, por estar ligado a un espíritu relajado y despreocupado y, desde entonces, lo han utilizado para elaborar artículos de todo tipo.
Ahora, grandes marcas de lujo, como Valentino y Bottega Veneta, ya han dejado claro que el crochet va a lucirse este verano en muchas prendas y complementos. Ambas firmas mostraron en sus pasarelas colecciones de vestidos elaborados con esta técnica, al igual que Fendi y Dolce & Gabbana, que ya han presentado bolsos de ganchillo. Bottega Veneta ha presentado hasta combinaciones enteras de esta técnica. Incluso, la marca Fendi ha rescatado los bolsos en forma de monedero de principios del siglo XX y más grandes de la década de los 50.
Este año, en todo tipo de colores y en todo tipo de prendas y accesorios podemos encontrar el crochet. Estas grandes marcas no son las únicas que nos ofrecen piezas hechas de ganchillo, ya que en las tiendas low cost como Zara, Mango o Stradivarius también podemos encontrar estas prendas con un precio bastante más asequible. Según apuntan estas tiendas, cuando llegue el calor los armarios se llenarán de artículos de ganchillo.
Pero aquí no acaba ‘yaya chic’. Los mocasines, esos zapatos con aire masculino que también llevan años triunfando en ventas, vuelven a situarse en el top tendencias primaverales de este año. El tacón alto se aparta para dejar paso a la comodidad de este calzado. Si a esto le sumamos los calcetines blancos, tenemos otra moda que viene de los 50, concretamente de Audrey Hepburn en 'Una cara con ángel' de 1957.
Audrey Hepburn, que marcó un estilo por aquel entonces y es un referente de la moda, también destaca por lucir en varias de sus películas pañuelos de seda. Los pañuelos, aquellas prendas que sujetaban el cabello de las mujeres para que no se moviera ni un solo mechón al subirse en una bici o moto –o donde fueran, pero la melena en su sitio–. Después de llevar horas con los rulos puestos, sería un desastre que se estropeara el resultado. Pues habrá que sacarlos del fondo del armario, porque es otra de las tendencias. Este accesorio había sido sustituido por fulares y pasminas, pero ahora ha querido recuperar su lugar de los años 40. Ya sea en el cuello o en la cabeza, grandes o más pequeños, las influencers ya los lucen en sus fotos de Instagram. Como en la siguiente foto de la 'it girl' por excelencia, Olivia Palermo, que lleva uno grande atado al cuello y con un broche –spoiler de la siguiente moda vintage que ya está de vuelta–.
Desde el mes de enero, los pañuelos de seda han aumentado en búsquedas en un 38%, los mocasines un 101% y el crochet un 45%. Pero aún hay otra tendencia del pasado que viene pisando fuerte. En este caso, no corre peligro el armario, sino el joyero: vuelven los broches. Como explica Lyst en su informe, “las piezas del armario de las mujeres mayores están haciéndose espacio en el look masculino”. Esto se debe al aumento de las búsquedas de broches para hombre de un 76% desde el mes de enero.
Ya se hizo eco todo el mundo de los broches cuando Lady Gaga lució uno en forma de paloma para la investidura de Joe Biden. Ahora, será mejor que las mayores cierren su joyero con llave, ya que el próximo otoño vuelven a la carga.
