Manuela Martín
Practicopedia
Pinta los azulejos del baño con estos sencillos pasos
Da una nueva vida a tu baño siguiendo estos consejos para pintar los azulejos fácilmente
Si quieres cambiar tu baño, pero no te apetece meterte en obras para quitar los azulejos, puedes llevar a cabo un cambio radical con solo pintarlos. Se trata de algo muy sencillo. A continuación, te explicamos cómo puedes hacerlo fácilmente paso a paso.
Si estás cansado de ver los mismos azulejos de tu baño desde hace años y quieres darle un cambio a esa estancia, ¿por qué no pintarlos? Es una práctica muy sencilla con solo seguir los siguientes consejos.
Lo primero que debes hacer es equiparte con todo el material necesario que se compone de: disolvente, pintura para azulejos, marcador de juntas, bandeja de pintura, rodillo, brocha pequeña, cinta carrocera, masilla y espátula, papel o sábanas para cubrir el suelo y un trapo.
Una vez que tengas todo el material, comienza por despejar el baño. Retira todo aquello que se pueda manchar o molestar como toalleros, por ejemplo.
A continuación, es importante preparar la zona que vayamos a pintar. Limpia previamente muy bien los azulejos para quitar cualquier resto de moho o suciedad que pueda quedar. Para ello, puedes utilizar lejía. Con la espátula quita cualquier resto de pintura que veas que está suelta y seguidamente rellena esas grietas y huecos entre los azulejos con un poco de masilla. Lija la masilla para conseguir que la zona quede uniforme.
El último paso para preparar la zona es limpiar con disolvente todos los azulejos y aclararlos con agua fría. Con este paso conseguiremos que la pintura se adhiera mejor.
Recuerda en todo momento que, dado que vas a utilizar productos tóxicos, la ventilación es muy importante, así como proteger el suelo, los muebles y la grifería con sábanas o papel.
Fase de pintura
Es el momento de abrir el bote de pintura. Coge una brocha pequeña y empieza delimitando las zonas que vayas a pintar para a continuación, usar el rodillo para pintar el resto de los azulejos.
Una vez finalizada la primera capa, déjalo secar durante 24 horas antes de dar la segunda.
Si has elegido un color diferente al blanco, es posible que las juntas se sigan notando blancas después de una segunda pasada por ello, haz hincapié para evitar que esto ocurra y se noten.
Deja secar durante al menos 5 días ya que es importante que el esmalte esté completamente seco. De lo contrario, el vapor y el agua de los baños podría estropearlo.
Pasado ese tiempo puedes volver a colocar todos los muebles y objetos en su sitio y disfrutar de un nuevo baño.