¿Por qué las toallas blancas pierden su color? Esta es la solución

En verano especialmente es muy habitual ver nuestras toallas oscurecidas después de cada uso. Ello es debido a que al secarnos parte de nuestro bronceado suele quedarse en las toallas. Si no las lavamos correctamente corremos el riesgo de que se oscurezcan y pierdan su blanco natural. A continuación, te damos algunos trucos para que luzcan como el primer día.

¿Por qué pierden su blanco?

El uso habitual o un mal lavado pueden estar detrás del desgaste de las toallas blancas, las cuales pueden tornarse amarillentas o grisáceas.

Las toallas deben lavarse semanalmente ya que suelen acumular mucha humedad y ser un foco de generación de microorganismos que pueden ser perjudiciales para la salud.

Además, es aconsejable secarlas correctamente tras cada uso.

Del mismo modo, es importante utilizar un jabón adecuado para la limpieza de las toallas, ya que, de lo contrario, este podría dañar el tejido acelerando su deterioro.

Igualmente, las toallas deben lavarse con un programa largo para quitar la suciedad correctamente. Al ser un tejido grueso, precisa de un lavado más fuerte que una prenda delicada. Además, solo recomendamos lavarlas con agua caliente cada 4 lavados aproximadamente. Con el agua caliente acabaremos con todos los gérmenes, pero iremos debilitando el tejido, con lo cual es algo que no debemos hacer con mucha frecuencia si queremos alargar la vida útil de esta prenda de baño.

Productos para blanquear las toallas

Vinagre

Podemos meter las toallas en un barreño con agua y vinagre blanco. Además de ayudarnos a acabar con los gérmenes, es perfecto para quitar los restos de jabón atrapados entre las fibras que dan ese color amarillento a las toallas.

Otra forma es echar un poco de vinagre blanco en el cajón del detergente durante el lavado en la lavadora.

Bicarbonato de sodio

Es uno de los productos estrella para el blanqueamiento de la ropa. Además de desinfectar en profundidad, es perfecto para una limpieza intensa. Podemos dejar las toallas en agua caliente con bicarbonato durante un par de horas o bien toda la noche y después lavarlas como habitualmente.

Lavadora

Existe un truco que consiste en la mezcla de ambos productos. Se trata de añadir una taza de vinagre en el cajetín del detergente antes de comenzar el lavado. Una vez finalizado el programa, volveremos a lavarlas, pero esta vez introduciendo media taza de bicarbonato de sodio en el cajetín.

Cuando finalice el lavado, sacaremos las toallas y las dejaremos secar al aire libre o con secadora. Verás los resultados.