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Practicopedia
Porqué se forman y cómo podemos evitar las placas de hielo en nuestro congelador
Se recomienda descongelarlo una vez al año como parte de su mantenimiento y cerrarlo bien siempre
Bien sea el de nuestro frigorífico o en un arcón independiente, el congelador, como cualquier otro electrodoméstico de los que encontramos en nuestras cocinas, requieren de un adecuado mantenimiento. Sobre todo, en este caso, para evitar la formación de placas de hielo en su interior. En especial si no tienen incorporado un sistema no frost para evitarlo.
¿Por qué se originan las placas?
En cualquier caso, debemos saber que esto puede ocurrir por varios motivos. Es posible que el ventilador no funcione correctamente lo que favorezca la formación de hielo o que la humedad que genera el congelador se condense al enfriarse. También contribuye a esta situación el hecho de abrir y cerrar con frecuencia el electrodoméstico o el no haberlo cerrado de forma adecuada.
El problema es que si hay demasiado hielo el sistema no funciona bien y los alimentos no se van a refrigerar de forma homogénea. Esto al final repercute en estos y en sus cualidades nutricionales. Y al mismo tiempo el consumo eléctrico es mayor, ya que el aparato se ve forzado a conseguir la temperatura correcta, y su vida útil acaba reduciéndose.
Qué medidas adoptar
Así pues para evitar que nos suceda esto deberemos ser precavidos y seguir unas pautas básicas.
- En la medida de lo posible hay que intentar no abrirlo constantemente para que el aire que penetre no contacte con las paredes y la humedad que hay en estas se condense, dando lugar a las placas.
- Los alimentos deben estar bien colocados en el interior, cuanto más desorden y caos reine es peor para la distribución del frío y el buen funcionamiento del congelador, lo que al final puede favorecer que surja el hielo.
- Debemos vigilar que la puerta cuenta con la protección adecuada en sus bordes para que se cierre herméticamente. Es decir, la goma que la rodea tiene que estar en buen estado, y no presentar deterioro de tal modo que pueda penetrar aire.
- Además, es recomendable descongelarlo cada cierto tiempo, lo más indicado es hacerlo una vez al año. Para ello, deberás vaciarlo y prever que durante unas horas no los vas a tener activo. Lo deberás desenchufar y esperar a que todo el hielo se derrita. El agua resultante se absorbe con una bayeta, papel o esponja. Una vez listo, lo deberás conectar de nuevo a la red eléctrica e ir introduciendo con orden todos los productos.