¿Qué pasa si bebo demasiada agua?

El agua es vida y mantenernos hidratados es esencial para el organismo, de forma que los médicos advierten que mucha gente no bebe lo suficiente. Pero la sobrehidratación, o beber demasiada agua también es un problema con consecuencias reales.

La sobrehidratación se basa en ingerir más agua de la que el cuerpo es capaz de eliminar. Dependiendo del grado de sobrehidratación al que hayamos llegado, puede afectarnos de diferentes maneras. 

Los síntomas inicialmente suelen ser bastante leves, como un dolor de cabeza, o sentir náuseas, pero a medida que se vuelve más grave, es posible que experimentemos cambios en el estado mental. Hasta el punto que los casos de sobrehidratación severa pueden provocar convulsiones, calambres musculares y desmayos. Son síntomas que se desarrollarían progresivamente, de forma que podemos atajarla cuando es leve, reduciendo la ingesta de agua. Y aunque la sobrehidratación es un problema poco común, debemos conocerlo. 

El cuerpo tiene un sistema para eliminar el agua a través de los riñones y la micción antes de que llegue al punto de ser peligroso. Y sabe como protegerse tal y como undican algunos estudios científicos. El problema es que cuanta más agua bebemos, más sodio necesita el cuerpo para sobrevivir.

Parar a tiempo

Normalmente es un síntoma que afecta a deportistas. Por ello, si estamos entrenando y bebiendo una cantidad excesiva de agua, puede que empecemos a sentir un dolor de cabeza, aturdimiento, náuseas o incapacidad para pensar con claridad, entonces puedes ser que hayas bebido demasiada agua y sea el momento de parar.

Otros síntomas que acompañan a la sobrehidratación son los calambres musculares y el cansancio que se produce a consecuencia de la disolución de sodio y potasio en la sangre. Ello también puede provocar, la hinchazón o acumulación de líquidos en la zona inferior de las piernas, la insuficiencia cardíaca congestiva (la falta de potasio puede modificar el ritmo del músculo cardíaco), o una somnolencia profunda.

Para saber qué cantidad de agua deberías beber todos los días, existen cálculos diferentes. Sin embargo, en promedio, un adulto sano debería considerar beber hasta un máximo de 3 litros de agua, aunque los expertos recomiendan 2.  El problema es que esta afirmación puede dar lugar a error, al interpretarse que dicha cantidad no incluye el agua presente en alimentos, como frutas y verduras. En cualquier caso, debemos beber agua cuando tenemos sed y estar atentos a los síntomas.