Manuela Martín
Practicopedia
Recupera tu escote después del verano con estos consejos
Cuida tu escote con estos ejercicios y cuidados diarios
El escote es una zona que produce poca melanina y por lo tanto está más expuesta a las quemaduras del sol lo que, unido a que es una parte de nuestro cuerpo donde se generan pocas glándulas sebáceas encargadas de lubricar y proteger la superficie de la piel, hacen del escote una zona vulnerable que debemos cuidar.
Limpieza y cuidados diarios
Al ser una piel tan sensible debemos cuidarla igual que la de nuestro rostro. Por ello, límpiala día y noche con los mismos productos. Aplica tus cremas faciales también en tu escote.
Utiliza diariamente protección solar del mismo modo que lo haces para tu cara.
Además, existen cremas específicas para hidratar y reafirmar la zona de escote y cuello que son muy eficaces.
Gimnasia
Si quieres tonificar tu escote te recomendamos que hagas deporte, en concreto, natación, ya que es uno de los que protege los ligamentos suspensores evitando el balanceo de las mamas durante el ejercicio.
En casa podemos tumbarnos con las rodillas flexionadas y las plantas de los pies en el suelo. A continuación, extenderemos los brazos por encima del pecho y los bajaremos en ángulo recto doblando los codos y sin que la parte posterior de los brazos llegue a tocar el suelo.
Otro ejercicio que podemos hacer en casa en el marco de alguna de las puertas consiste en colocarnos de pie ligeramente inclinadas hacia delante flexionando hacia delante doblando los codos en ángulo recto.
Recuerda utilizar sujetadores específicos para la práctica deportiva que soporte con firmeza a las mamas.
Hacia arriba
Si miramos constantemente hacia abajo provocaremos flacidez y arrugas en nuestro escote, por ello, te recomendamos que cuando estés frente al ordenador, con tu móvil o leyendo un libro siempre lo eleves un poco para levantar tu mirada y evitar la distensión de tejidos en tu pecho.
Alimentación
Como no podía ser de otro modo, la alimentación también es un factor fundamental a la hora de tener un escote firme.
Es importante una dieta rica en antioxidantes para luchar contra el envejecimiento de la piel. Estos los puedes encontrar en los cítricos como la grosella negra, frutos secos como las nueces o almendras, legumbres y semillas como los guisantes o las lentejas, o la carne y el pescado.
Cambios hormonales
Los cambios hormonales que ocurren durante la adolescencia, embarazos o menopausia afectan a nuestro escote, aumentando la aparición de manchas y arrugas en la piel.
En este sentido, estados de ánimo como el estrés también puede afectar a nuestro escote, con lo cual, relájate.