Manuela Martín
Practicopedia
¿Has quemado la ropa planchando o te han aparecido brillos? Estos son los trucos para solucionarlo
Soda, agua helada o una lima de uñas pueden acabar con las manchas de la plancha en la ropa
¿Te ha ocurrido alguna vez que al planchar una camisa oscura han aparecido unos espantosos brillos? O ¿te has puesto al teléfono mientras planchabas y al volver tu ropa se ha quemado? Si te ha ocurrido algo así durante alguno de tus planchados, toma nota a estos remedios caseros para solucionarlo y que tu ropa vuelva a lucir perfecta.
La ropa recién planchada es signo de limpieza, higiene y elegancia. Pero en algunas ocasiones, la plancha puede jugarnos malas pasadas. A continuación, vamos a tratar de ver las más habituales y cómo podemos solucionarlo.
Manchas de óxido procedentes de la plancha
Uno de los mejores métodos para quitar manchas de la plancha en la ropa es aplicar soda sobre ellas. Tras verter un poco de soda sobre la zona, sécala con una toalla suavemente, verás cómo van desapareciendo las manchas.
El vinagre blanco o el limón también son dos productos muy eficaces para quitar manchas. Coge un trapo y humedécelo con uno de estos productos y a continuación, frota sobre la mancha para seguidamente meterlo en la lavadora.
Brillo en la ropa negra
Sumerge un paño limpio de color claro en vinagre blanco y exprímelo bien. Colócalo sobre el área brillante de la prenda y sostén la plancha sobre el paño hasta que veas que el vapor haya penetrado bien, pero si que llegue a tocar el paño.
A continuación, coge el paño y frótalo contra el material yendo en contra del tejido. Esto debería levantar las fibras, eliminando el brillo.
Recuerda planchar la ropa negra al revés o bien poner un trozo de tela entre la plancha y la ropa oscura para evitar que aparezcan brillos.
Quemadura
Aunque no siempre es posible quitar una mancha de quemadura, hay algunos trucos que podemos hacer, especialmente en los tejidos de algodón y lino.
Uno de los primeros remedios consiste en mojar la prenda y añadirle un poco de detergente líquido. Si ves que la mancha es muy grande y el tejido lo permite, puedes sumergirla en agua con lejía durante unos 15 minutos. A continuación, introdúcela en la lavadora en el programa específico según el tejido. Una vez terminado el lavado ponla a secar a la luz del sol, ya que los rayos son un gran aliado para aclarar todo tipo de manchas. Puedes repetirlo tantas veces como sea necesario.
El agua helada es otro remedio casero muy utilizado en estos casos. Basta con dejar la prenda quemada en remojo en agua helada durante una hora aproximadamente y a continuación la lavaremos siguiendo las instrucciones de la etiqueta.
Si la quemadura es muy grande, prueba a restregar con una lima de uñas ya que de esa forma eliminaremos el material quemado. Con este remedio no conseguiremos deshacernos de la mancha pero sí disimularla ligeramente.