Manuela Martín
Practicopedia
¿Se pueden congelar los caracoles?
Se recomienda consumirlos cuanto antes incluso cuando los congelemos
Si eres un amante de los caracoles seguro que te molesta poderlos comer solo durante unos meses del año. Esto te habrá llevado en más de una ocasión a preguntarte ¿se pueden congelar los caracoles? A continuación, trataremos de darte una respuesta, así como a enseñarte las diferentes opciones que existen.
Los caracoles son un alimento muy delicado. Por ello, los expertos recomiendan lavarlos bien, cocinarlos y consumirlos en el menor tiempo posible. De este modo, evitamos que proliferen microorganismos indeseados perjudiciales para nuestra salud.
Según la Fundación Alimentum, se trata de un producto que, aunque los congelemos (con o sin salsa), debemos consumirlos igualmente cuanto antes para evitar posibles contaminaciones, así como el crecimiento de microorganismos.
A la hora de congelarlos, es aconsejable hacerlo al poco tiempo de haberlo cocinado para evitar la aparición de cualquier microorganismo. Lo recomendable es hacerlo siempre con un poco de caldo.
Caracoles congelados
Existen muchas empresas que los venden congelados y listos para cocinar. Se trata de una forma de tener caracoles durante todo el año. La empresa Helifrusa es un ejemplo de ellos. Sus caracoles congelados deben consumirse en un plazo de 48 horas una vez abierto y siempre conservado en el frigorífico.
Los caracoles se crían principalmente en las regiones marroquíes de Gharb, Lukus, Tánger y Tetuán.
Cuando compramos caracoles congelados en bolsa, estos se han de conservar a una temperatura aproximada de -18ºC y no es recomendable volver a congelarlos una vez descongelados. La caducidad de estos caracoles es de 2 años (24 meses) desde su primera congelación.
Cocinar caracoles congelados no afecta a sus beneficios nutritivos, ni tampoco a su sabor.
Consejos sobre los caracoles
Se suelen vender en la zona de refrigeración de tiendas, supermercados y establecimientos.
Al tratarse de un alimento muy delicado desde el ámbito microbiológico, cuando los cocines en casa, en el momento que la olla esté fría, hay que guardar los caracoles en el frigorífico.
Respecto al tiempo que podemos tenerlo en la nevera, este no deberá ser superior a los 4 días.
Cuántos más días pasen, además de ser perjudiciales para la salud, irán perdiendo su sabor.
Receta caracoles al poleo: 2 kilos
Una de las formas más típicas de consumir caracoles, especialmente los pequeños son al poleo. Se trata de una receta típica de algunas zonas de Andalucía.
Para cocinarlos (una vez hayamos llevado a cabo todo el proceso de limpieza profunda), ponemos los caracoles en una olla grande al fuego con sal y los cubrimos con agua fría. A contiunacion los coceremos a fuego lento hasta que comiencen a salir de sus conchas. En ese momento, añadiremos las especias (poleo, guindilla, comino, cilantro y pimienta negra) en una bolsita. Finalmente añadiremos 4 cabezas de ajo enteras y la sal.
Dejaremos hervir hasta que el caldo coja color y listo para degustar.