El secreto para que no se corte la mayonesa

Estás liado en la cocina preparando una ensaladilla rusa para sorprender a la familia y te dispones a preparar una rica mayonesa casera. Para que puedas disfrutar del todo el sabor y no se eche a perder esta elaboración, te contamos los tres pases que debes seguir para hacer una mayonesa de forma sencilla, rápida y que no se corte. Toma nota.

La mayonesa es una de las recetas más tradicionales y míticas en nuestras cocinas. La gran variedad de mayonesas que podemos encontrar en el supermercado nos pone complicado que invirtamos tiempo, ingredientes y esfuerzo en hacer una buena mayonesa casera. Aunque, en esta corriente que busca cada vez platos y recetas más naturales, una receta casera de mayonesa seguro que triunfa.

Ingredientes muy sencillos

La mayonesa tiene cuatros simples y sencillos ingredientes y estos son: el huevo, el aceite, unas gotas de zumo de limón y una pizca de sal. Para elaborar esta receta es tan sencillo como mezclar todos esos alimentos y batirlos. Aunque el proceso de sencillo nada, puesto que no es difícil que la mayonesa se corte y termine en el cubo de la basura.

Los motivos por los que la mayonesa se suele cortar son porque o bien se añade aceite en exceso o bien batimos los ingredientes muy rápido y con demasiada potencia. Así que el primer consejo es paciencia para evitar imprevistos que nos hagan fracasar.

Otra de las razones es porque el huevo es muy viejo, por lo que la forma de evitarlo es asegurarse de que estamos usando un huevo lo más fresco posible.

Lo segundo que tenemos que tener en cuenta es vigilar la temperatura de todos los ingredientes. Es importante que todos, aceite, huevo y zumo de limón, tengan una temperatura similar, por lo que lo mejor es dejarlos a temperatura ambiente durante un buen rato antes de comenzar a preparar la mayonesa.  

El otro aspecto que tenemos que tener en cuenta es la potencia a la que batimos la mayonesa. Poner la batidora la potencia máxima es un error. Al comenzar a elaborar la mayonesa, apoyamos la batidora en el fondo del vaso y empezamos a batir a velocidad media sin mover la batidora hasta que veamos que se han mezclado completamente todos los ingredientes y la mezcla empieza a blanquear. En ese momento subimos a la velocidad turbo y vamos añadiendo aceite poco a poco mientras movemos la batidora de arriba a abajo despacito hasta que tenga la textura que buscamos.