Con la llegada del frío, nos ponemos a preparar la ropa de invierno, guantes y bufandas, organizar la Navidad y los regalos... En definitiva, pensamos en los próximos eventos y cómo protegernos del clima, pero nos olvidamos de algo muy relevante que también se ve afectado por las bajas temperaturas: nuestra piel. Siempre es bueno recordar que, ya sea con un tiempo frío y seco o con calor y humedad, el clima puede afectar a la piel de todo el cuerpo, causando desde quemaduras en las manos hasta parches secos con picazón. Las condiciones climáticas extremas, tanto calientes como frías, pueden exacerbar algunas afecciones cutáneas existentes o incluso causar otras nuevas.
La estación más fría supone un trabajo extra para nuestra epidermis. A lo largo de los meses de invierno, es muy común que muchas personas noten su piel más áspera, roja, agrietada o escapada debido a la sequedad. Por ello, la Academia Española de Dermatología y Venereología (@aedv_es) señala los siguientes consejos para proteger nuestra piel del frío lo mejor posible.
Hidrátate
La hidratación es fundamental para cuidar la piel, sobre todo si padeces algún tipo de dermatosis como dermatitis atípica o psoriasis. Durante esta estación hay que seguir poniéndonos crema en todo el cuerpo, pero en especial en la cara y las manos que son las partes más expuestas. Los expertos aseguran que un emoliente adecuado (a base de lanolina, urea, etc.) ayuda a conservar la piel sana durante estos meses.
Igualmente, los labios también sufren mucho en invierno, por lo que no debemos olvidarnos de hidratarlos y protegerlos de la luz ultravioleta.
Usa la crema adecuada
Las cremas se eligen en función de cada tipo de piel. Las personas con pieles sensibles se recomienda que usen principios activos como vitamina C, ácido retinoico, ácido glicólico y los hidroxiácidos, etc. Sin embargo, hay pieles intolerantes que deben utilizar sustancias calmantes, vasoconstrictoras y descongestivas, como el dexpantenol, alfabisobolol, rusco, ácido glicirrético… Aún así, lo mejor será consultar a un dermatólogo cuál es la más apropiada para ti.
La textura depende también de cada tipo de piel, por norma general, el fluido será mejor para las pieles mixtas o grasas y la crema para las maduras y secas.
Evita las duchas calientes
Cuando hace tanto frío en la calle, lo más normal es que llegues a casa y lo que más te apetezca sea darte una ducha caliente y quedarte debajo del agua un buen rato. Sin embargo, estono es conveniente porque lo que mejor viene a nuestra dermis es el agua tibia. Además, desde AEDV indican que no debemos ducharnos más de una vez al día porque, de lo contrario, aumentaría la deshidratación de la piel.
Cuida la alimentación
Los alimentos ricos en vitamina C y antioxidantes son los más recomendables para el bienestar de la piel.
Cualquier fruta o verdura cruda tiene una cantidad considerable de vitamina C, por lo que consumir diariamente cinco raciones de fruta y verdura (perejil, pimiento rojo, brócoli, coles de Bruselas, el berro...), es suficiente para garantizar el aporte diario de esta vitamina.
Además, los especialistas insisten en que hay que beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día.
Evita el tabaco y alcohol
El tabaco no es recomendable nunca, ya que repercute negativamente en nuestra salud en todos los aspectos. El alcohol no tanto, siempre y cuando no sea excesivo, pero en este caso puede . Aún así, debemos evitar a ambos porque
Sobre el autor:
Marta Vicente
Marta Vicente Carmona es Graduada en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos y Máster de Marketing Digital y en Edición y Postproducción Digital. Es redactora especializada en temas de sociedad y salud y tiene experiencia como Community Manager.