El truco para conservar los ajos y las cebollas frescos hasta seis meses

Tanto el ajo como la cebolla son ingredientes que no pueden faltar en cualquier cocina española, pues son clave en muchos de los platos de la dieta mediterránea. Conservarlos de manera efectiva es clave para mantener su frescura y sabor.

Lo primero que debes saber es que hay que evitar guardarlos en el frigorífico, ya que corren el riesgo de ablandarse y enmohecerse debido al exceso de humedad. Entonces, ¿cómo debemos almacenarlos para que duren más tiempo?

La clave está en conservar el ajo y la cebolla en un espacio fresco, oscuro y bien ventilado de la cocina; de este modo, podrán mantenerse en buen estado durante un período que oscila entre los tres y seis meses. Sin embargo, no basta con simplemente colocarlos en un armario; la manera en que los almacenas resulta fundamental.

 

 

Monica Matheny, experta en cocina y fundadora de The Yummy Life, explica al diario Mirror que estaba teniendo problemas para mantener frescos sus ajos y cebollas, porque cuando los colocaba en un cajón de la cocina, se pudrían muy pronto. 

Fue entonces cuando su madre le compartió un ingenioso truco. "Hace unos meses, mi madre (también conocida como Grammy) vino al rescate. La última vez que la visité, me mostró cómo había empezado a almacenar sus cebollas, ajos y chalotes".

Su recomendación consistía en poner estos alimentos en una bolsa de papel, que anteriormente haya sido perforada con agujeros.  A pesar de desconfiar en un inicio de su truco, Monica puede afirmar ahora que funciona. 

Las bolsas de papel perforadas permiten la circulación de aire suficiente para conservar estas verduras durante un largo periodo de tiempo. Además, es importante asegurarse de que estos productos estén en un estado firme, ya que suele ser señal de su frescura.

Para comenzar, doble la bolsa por la mitad y perfore un borde. A continuación, gire la bolsa doblada y perfore el otro borde. Continúe haciendo agujeros separados unos de otros en el resto de la bolsa. Estos no tiene por qué quedar perfectos. 

Por último llena la bolsa hasta la mitad con tus ajos y cebollas, y ¡listo! Ya solo queda comprobar la efectividad de este truco.