El truco para madurar en casa un melón o sandía que ha salido verde

La sandía y el melón son fruta refrescantes y deliciosas, perfectas para los días calurosos y llenas de nutrientes esenciales. Elegir la mejor pieza en el supermercado puede parecer una tarea complicada, pero con algunos consejos prácticos, puedes asegurarte de llevar a casa la fruta más jugosa y sabrosa. Aquí te ofrecemos una guía detallada para seleccionar la sandía y el melón perfectos.

Guía práctica para sandías:

1. Forma y Tamaño:

   • Busca una sandía que tenga una forma uniforme. Evita las que tengan abolladuras, cortes o formas irregulares, ya que estos pueden indicar problemas de crecimiento.
   • El tamaño también es importante. Aunque el tamaño puede variar, una buena sandía debe sentirse pesada para su tamaño. La densidad es un buen indicador de contenido de agua y, por lo tanto, de jugosidad.

2. Color y piel:

   • Una sandía madura tiene un color verde oscuro uniforme y una cáscara opaca. Evita las sandías con partes brillantes, ya que esto puede indicar que aún no están maduras.
   • Revisa la “mancha de tierra”, el lugar donde la sandía descansó en el suelo. Una mancha amarilla cremosa sugiere que la sandía ha madurado adecuadamente. Si la mancha es blanca o verde, la sandía probablemente no está madura.

3. Sonido:

   • Golpea ligeramente la sandía con los nudillos. Una sandía madura debe producir un sonido hueco. Si el sonido es apagado o denso, la fruta puede estar sobremadura o inmadura.

4. Tacto:

   • La cáscara debe ser dura y resistente. Una piel blanda puede indicar que la fruta está pasada.

Guía práctica para melones:

1. Aroma:

   • Un melón maduro tiene un aroma dulce y fragante, especialmente en el área donde estaba el tallo. Si el melón no tiene olor, probablemente no está maduro. Por el contrario, un olor muy fuerte puede indicar que está sobremaduro.

2. Color y Piel:

   • El color del melón debe ser uniforme. Para el melón cantalupo, busca una piel de color dorado o beige con una red bien definida de venas. Para el melón Honeydew, elige uno que tenga un color entre amarillo pálido y blanco cremoso.
   • La piel debe ser ligeramente rugosa. Una piel completamente lisa puede indicar que el melón aún no está maduro.

3. Peso:

   • Al igual que con la sandía, el melón debe sentirse pesado para su tamaño, lo que indica un buen contenido de agua y jugosidad.

4. Tacto:

   • Presiona suavemente el extremo opuesto al tallo. Debe ceder ligeramente bajo la presión, lo que indica que está maduro. Si está demasiado duro, aún no está listo para comer, y si está muy blando, puede estar sobremaduro.

5. Sonido:

   • Aunque menos común que con las sandías, también puedes intentar dar unos golpecitos al melón. Un sonido hueco puede indicar madurez, pero confía más en el peso y el aroma para esta fruta.

Consejos Adicionales

Además, la época del año es crucial para encontrar las frutas más frescas y ricas en sabor. En general, los meses de verano son los mejores para encontrar estas frutas en su punto óptimo. Por otra parte, siempre que sea posible, se recomienda elegir las frutas de proveedores locales. La fruta local no solo es más fresca, sino que también apoya a los agricultores de la zona y puede tener un menor impacto ambiental debido a la reducción en el transporte.

Truco de la OCU para madurarlo en casa

Elegir la mejor sandía o melón en el supermercado no tiene que ser una tarea intimidante. Con estos consejos prácticos, puedes seleccionar frutas maduras, jugosas y llenas de sabor. La próxima vez que vayas de compras, recuerda prestar atención a la forma, el color, el peso, el aroma y la textura para asegurarte de llevar a casa la mejor fruta posible. Disfruta de estos deliciosos y refrescantes frutos en su mejor momento y añade un toque de frescura a tus comidas y refrigerios.

Sin embargo si ya es tarde y has comprado un melón o sandía sin madurar, la Organización de Consumidores y Usuarios tiene un consejo para madurarlas en casa y al alcance de todos.

Según la OCU, puedes hacer madurar estos frutos en casa guardándolos en una bolsa de papel (nunca de plástico) junto con una manzana o un plátano. Estos frutos emiten etileno, un gas que acelera el proceso de maduración.

Para poner en práctica este truco, tan solo tienes que colocar la bolsa en una habitación seca y fresca y esperar unos días. Este sencillo truco puede salvar tu compra y garantizar que disfrutes de una fruta perfectamente madura.