Anna Blanco
Practicopedia
Trucos para hacer el cambio de armario de forma eficiente y rápida
Guardar la ropa según su uso o, incluso, por colores son hábitos que pueden facilitar el día a día
Las temperaturas suben y los jerséis de lana o las bufandas han pasado a ser un estorbo en nuestro armario. No queda otra que preparar el cambio de armario que deje sitio a las prendas de telas ligeras y manga corta. Es algo que nos toca hacer dos veces al año, si no tenemos la suerte de contar con un armario lo suficientemente grande para tener a mano la ropa de todo el año, y vale la pena poner atención en cómo hacerlo de una forma eficiente para que la ropa quede bien guardada, optimicemos al máximo el espacio y no perdamos más tiempo del necesario.
Veamos, pues, algunos consejos para que la tarea del cambio de ropa de temporada nos dé la posibilidad de tener como resultado un armario en perfecto orden:
- El primer paso es vaciar armarios y cajones con todo lo que debemos guardar hasta el siguiente cambio y que, por tanto, no vamos a necesitar hasta que bajen las temperaturas. Los expertos del orden en casa recomiendan este paso y no dejar nada en el armario o ir cambiando por partes para tomar conciencia de todo lo que tenemos y así organizar bien cómo lo vamos a guardar.
- Y de ahí, pasamos al segundo paso, que es clave para llevar a cabo un buen cambio de armario. Se trata de revisar todo lo que tenemos y deshacernos de aquello que no necesitamos, que no nos hayamos puesto en las últimas temporadas o simplemente que no nos guste. A veces es difícil y preferimos guardar 'por si acaso' pero guardar si no es realmente necesario solo nos va a ocupar más espacio y nos va a generar más trabajo en cada cambio.
- Una vez que hemos seleccionado lo que vamos a mantener, es hora de guardarlo todo en las cajas o en los lugares en los que van a permanecer los próximos meses. Por ello, es importante hacerlo correctamente si queremos que en el próximo cambio de armario la ropa esté en perfectas condiciones: la ropa limpia (si se nos pasa alguna mancha, luego seguramente será mucho más difícil de eliminarla) y los trajes o abrigos mejor en fundas en las que estén lo más estirados posibles.
- Una vez que tenemos la ropa de invierno guardada, es hora de colocar la de verano y entretiempo que vamos a utilizar durante los próximos meses. Pero antes, genial si aprovechamos para limpiar el armario y cajones ahora que los tenemos vacíos y para colocar bolsitas con flores secas o pastillas de jabón para disfrutar de un aroma a limpio.
- A la hora de colocar la ropa en el armario, hay que tener en cuenta el uso que vamos a darle. Es decir, la parte central del armario o los cajones superiores debemos reservarlos para la ropa que usemos más frecuentemente, mientras que aquella que, por ejemplo, solo utilicemos los fines de semana o para alguna actividad puntual no es necesario que esté tan a mano. Así facilitamos encontrar lo que buscamos y, con ello, ayudar a mantener el orden.
- Si ya queremos ir a por nota, los expertos también recomiendan guardar la ropa en los armarios por colores o tonalidades porque afirman que así encontraremos lo que buscamos más fácilmente.
- Y, un último consejo, no nos olvidemos que los accesorios (pañuelos, sombreros o bolsos, por ejemplo) también necesitan un cambio de armario para tenerlo todo bien ordenado y en su sitio.