Remoja tus pies en vinagre durante 15 minutos: no te arrepentirás

Los múltiples usos del vinagre son bien conocidos: para el aliño de nuestras ensaladas, como desinfectante o como una potente herramienta para la limpieza del hogar. Pero lo que quizás no es tan conocido es su uso para el cuidado de nuestros pies.

El vinagre proviene de la fermentación acética del alcohol y contiene una concentración que va del 4% al 7% de ácido acético en agua, lo que le proporciona propiedades antimicrobianas. Su origen se dice que fue por casualidad cuando hace unos 10.000 años, se empezaron a elaborar las primeras bebidas alcohólicas, ya que el vinagre se consigue tras la fermentación de casi cualquier sustancia que contenga azúcar o almidón. 

Prevenir los hongos en los pies

El pie de atleta es la infección por hongos más común de todas, se trata de una infección micótica que se contagia principalmente en ambientes húmedos donde podemos ir descalzos como duchas públicas, vestuarios, piscinas, etc. Como el vinagre tiene propiedades antifúngicas, remojar los pies en un baño de vinagre puede ayudar a combatir las infecciones por hongos, como el pie de atleta. Para ello, solo tendremos que poner los pies en agua con vinagre a partes iguales durante 15 minutos todos los días. 

Ayuda para quitar verrugas

Para colaborar en la eliminación de verrugas, los expertos en remedios naturales también aconsejan el uso de vinagre, en este caso el de sidra. Para eliminarlas, debemos aplicar el vinagre directamente sobre las verrugas, dejar actuar durante 15 minutos y luego enjuagar con agua limpia, recordando hacerlo cada día.

Para el picor en los pies

Los picores en los pies pueden deberse a los hongos, unos zapatos nuevos o a una infección. Pero al margen de cual sea la causa, el uso de vinagre puede calmar el picazón y el ardor ocasionado por cualquier tipo de urticaria. Para conseguirlo, debemos dejar los pies en agua con tres cucharadas de vinagre durante 20 minutos.  

Para suavizar los pies

Otro uso del vinagre para el cuidado de los pies es para completar una pedicura casera. De esta manera, el vinagre puede ser un gran aliado para eliminar las durezas de los talones, solo hay que poner lo pies en remojo con vinagre blanco y agua tibia durante 45 minutos. Luego, exfoliar esa zona será mucho más fácil, dejando la piel muy suave. 

Contra el mal olor

Si el mal olor en nuestros pies se produce por el sudor (cuando entra en contacto con las bacterias que tenemos en la piel, produciendo en su descomposición amonio y ácido graso), el vinagre puede ser de ayuda para combatirlo. Esto es así porque tiene efectos bactericidas y cambia el pH, la medida de acidez o alcalinidad de las sustancias y muchas bacterias que sobreviven en un medio alcalino mueren al contacto con el ácido acético.