Manuela Martín
Practicopedia
¿Vistas feas desde tu ventana? Trucos para disimularlas
Con vinilos, plantas, cortinas o una obra de arte personalizada
A algunas personas les ocurre que, aunque tienen una casa ideal, cuando se asoman por la ventana se deprimen porque tienen unas vistas horribles. Si es tu caso, no te preocupes, tenemos algunas ideas muy sencillas y económicas para que olvides lo que tienes en frente.
Un muro, un edificio, tejados, un patio, un cementerio, un hospital… En ocasiones las vistas de algunas ventanas no son lo más agradables o bonitas del mundo. Sin embargo, tienen solución.
Cortinas
Si las vistas más allá de tu ventana no es lo mejor que puedes enseñar, frena tu visión antes con unas cortinas. Finas o gruesas, claras u oscuras según tu decoración, estilo o la luminosidad que desees para esa estancia.
No tengas miedo a jugar con texturas, estampados, colores o estilos ya que el objetivo es que las cortinas sean el centro de atención y no las vistas que hay tras ellas.
Decoración
¿Por qué decorar toda la estancia menos la ventana? Si tienes la suerte de tener una pequeña repisa delante de la ventana, sitúa algún objeto decorativo en ella como jarrones, flores, cuadros, libros o una escultura.
De ese modo, ocultarás parte de las vistas a la vez que creas un lugar mucho más bonito en el interior que en el exterior.
Plantas
Las plantas dan alegría, vida, color, etc. Es una forma perfecta de contrarrestar esas vistas hacia patios oscuros y sombríos, cemento o ladrillo. Puedes utilizar jardineras en el exterior de la ventana o bien unas maceras delante de la ventana que transformen lo gris en verde gracias a la naturaleza.
Cristales traslúcidos
Si no quieres renegar de la luz, pero tampoco quieres ver lo que hay detrás de tus ventanas, lo mejor es que optes por unos cristales traslúcidos que eviten distinguir lo que hay en el exterior.
Vinilo
Hay vinilos que también dejan pasar la luz. Si lo que necesitas es alegrarte con un fondo de flores o colores, puedes optar por un vinilo en la ventana.
Esta opción también es buena si el problema está en una pared poco agraciada que tenemos en casa.
También puedes optar por un tratamiento de esmerilado, aunque es un poco más caro. Se trata de un chorro a presión de un material mineral que se le da al cristal para quitarle la capa superficial brillante y le de opacidad. Puedes hacer incluso un diseño.
¿Te gusta dibujar?
Por qué no pruebas a hacer una decoración personalizada con un graffiti o un dibujo en el propio cristal. Existen pinturas para vidrio que las venden en tiendas especializadas de bricolaje. Prepara un diseño, busca patrones y dibuja en el vidrio los motivos que prefieras, después rellénalos con las pinturas y disfruta de una obra artística hecha por ti.