A las personas que les guta ‘comer’ y en abundancia les resulta díficil controlarse y, sobre todo, poner freno a su apetito voraz. Pero antes vamos más atrás en el tiempo. La grelina, una hormona gástrica que regula el apetito y la homeostasis nutricional, fue descubierta en 1999.
Aunque los primeros trabajos se centraron su capacidad de la grelina para estimular la liberación de la hormona del crecimiento, desde entonces se ha demostrado que tiene efectos biológicos de amplio alcance en áreas que incluyen el equilibrio energético, el apetito, la homeostasis de la glucosa, la función inmunológica, el sueño y la memoria, tal y como señala un estudio de 'Molecular Metabolism'.
La grelina existe en dos formas, acilada (AG) y desacilada (DAG), y la mayoría circula como DAG Aunque es menos abundante, la AG está mejor caracterizada, ya que se sabe que se une a GHSR1a y es catalizada por la O-aciltransferasa de grelina (GOA). Inicialmente se pensó que la DAG era inactiva, pero ahora se sabe que se une a un receptor no identificado con efectos biológicos independientes. La capacidad de diferenciar entre ambos tipos de gelina y su señalización fisiológica es importante para determinar si actúan de manera independiente, antagónica o sinérgica dentro del cuerpo, recuerda el ensayo mencionado anteriormente.
Los efectos de la grelina sobre el apetito resaltan su impacto divergente de las dos formas. Si bien el AG ha estimulado el apetito en modelos humanos y animales, se ha demostrado que el DAG no tiene efecto o lo sumprime.
Este efecto particular es de interés en los estudios de ejercicio, ya que el ejercicio agudo de intensidad apropiada puede suprimir el apetito en poblaciones sanas y en poblaciones con obesidad, recuerda un investigación de 'Physology and Behavior'. Sin embargo, la literatura sobre el vínculo entre el ejercicio, el apetito y los niveles de grelina está mal definida. Además, los estudios previos generalmente han incluido solo hombres adultos jóvenes y sanos, lo que limita la aplicabilidad en el mundo real.
Identificar la dosis ideal de ejercicio para la supresión del apetito puede tener utilidad clínica como una intervención para la pérdida de peso.
Nuevos hallazgos
Ahora llega una nueva investigación que ha indagado la intensidad del ejercicio sobre el apetito y los niveles de grelina y evaluar las diferencias de género. De hecho, constata que un entrenamiento vigoroso hace más para suprimir los niveles de hambre en adultos sanos que el ejercicio moderado, y las mujeres pueden ser especialmente susceptibles a esta respuesta, tal y como publica el 'Journal of the Endocrine Society'.
El estudio examina los efectos de la intensidad del ejercicio sobre los niveles de grelina y el apetito en hombres y mujeres. La grelina es conocida como la 'hormona del hambre' y está asociada con la percepción del mismo.
"Hemos descubierto que el ejercicio de alta intensidad suprime los niveles de grelina más que el ejercicio de intensidad moderada", ha afirmado la autora principal, la Dra. Kara Anderson, de la Universidad de Virginia y el Sistema de Salud de la Universidad de Virginia en Charlottesville, Virginia (ambos en EEUU). ""Además, hemos descubierto que las personas sienten 'menos hambre' después del ejercicio de alta intensidad en comparación con el ejercicio de intensidad moderada", ha puntualizado.
La grelina circula en forma acilada (AG) y desacilada (DAG), que se sabe que afectan el apetito. Los datos sobre el impacto de la intensidad del ejercicio en los niveles de AG y DAG, y sus efectos en el apetito, son escasos y se limitan principalmente a los hombres, señaló el estudio.
Los participantes
Para subsanar esta deficiencia, el estudio examinó a ocho hombres y seis mujeres. Los participantes ayunaron durante la noche y luego completaron ejercicios de distintos niveles de intensidad, determinados mediante mediciones del lactato en sangre, seguidas de mediciones del apetito informadas por los propios participantes.
Las mujeres tenían niveles más altos de grelina total al inicio del estudio en comparación con los hombres, pero sólo las mujeres demostraron una "AG significativamente reducida" después del ejercicio intenso, según los hallazgos.
"Hemos descubierto que la intensidad moderada no modifica los niveles de grelina o bien provoca un aumento neto", señala el estudio. Estos hallazgos sugieren que el ejercicio por encima del umbral de lactato puede ser necesario para provocar una supresión de la grelina.
Los investigadores también ha reconocido que se necesita más trabajo para determinar en qué medida los efectos del ejercicio difieren según el sexo. Se ha demostrado que la grelina tiene efectos biológicos de amplio alcance en áreas que incluyen el equilibrio energético, el apetito, la homeostasis de la glucosa, la función inmunológica, el sueño y la memoria.
"El ejercicio debe considerarse como una 'droga', en la que la 'dosis' debe personalizarse en función de los objetivos personales de cada persona, Nuestra investigación sugiere que el ejercicio de alta intensidad puede ser importante para la supresión del apetito, lo que puede ser particularmente útil como parte de un programa de pérdida de peso", ha enfatidazo hambre
Sobre el autor:
Patricia Matey
Licenciada en Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid. 1986-1991), es periodista especializada en información de salud, medicina y biociencia desde hace 33 años. Durante todo este tiempo ha desarrollado su profesión primero en el suplemento SALUD de EL MUNDO (22 años), luego como coordinadora de los portales digitales Psiquiatría Infantil y Sexualidad en el mismo diario. Ha colaborado en distintos medios como El País, La Joya. la revista LVR, Muy Interesante, Cambio 16, Indagando TV o El Confidencial. En este último ejerció de jefa de sección de Alimente durante cuatro años. Su trayectoria ha sido reconocida con los premios de periodismo de la Sociedad Española de Oncología Médica, premio Boehringer-Ingelheim, premio de la Asociación Española de Derecho Farmacéutico, premio Salud de la Mujer, premio de Comunicación del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid o Premio de Periodismo de Pfizer. Actualmente es la responsable de la sección Cuídate+ sobre longevidad saludable de 65YMÁS.