Sí a los suplementos de vitamina D, pero con estas condiciones
La deficiencia de vitamina D es común en todo el mundo y se ha asociado con enfermedades cardiovasculares e inmunológicas, infecciones y cáncer, como documenta un estudio de 'Journal of Clínical Endocrinology and Metabolism'.
Grandes investigaciones han proporcionado evidencia epidemiológica que vincula su déficit con un mayor riesgo, por ejemplo, de hipertensión. La asociación entre la 25 hidroxivitamina D (25OHD) y la presión arterial (PA) parece ser consistente en estudios observacionales, incluso después de ajustar los factores de confusión relevantes Un metaanálisis de estudios observacionales encontró que cada disminución de 16 ng/mL en dicha vitamina se asoció con un riesgo 16% mayor de presión arterial elevada. Y otro en 'Lancet Diabetes Endocrinology', basado en estudios genéticos poblacionales, sugirió que los polimorfismos relacionados con el estado de la misma más bajo se asociaron con una presión más alta. Además, se ha demostrado que los niveles bajos de 25OHD predicen la hipertensión futura entre individuos con tensión arterial normal al inicio. Sin embargo, los resultados de los ensayos aleatorios han sido contradictorios, y algunos sugieren un beneficio.
Nuevas evidencias
Ahora llega una nueva investigacion, publicada en 'Journal of the Endocrine Society', que indica que los suplementos de vitamina D pueden reducir la presión arterial en personas mayores con obesidad y tomar más de la dosis diaria recomendada por la Academina Nacional de Medicina de EEUU no proporciona beneficios adicionales para la salud. La institución recomienda 600 Unidades Internacionales (UI) por día. "Nuestro estudio encontró que los suplementos de vitamina D pueden reducir la presión arterial en subgrupos específicos, como las personas mayores, las personas con obesidad y posiblemente aquellas con niveles bajos de la misma", ha comentado Ghada El-Hajj Fuleihan, del Centro Médico de la Universidad Americana de Beirut en Beirut, Líbano, y autor del estudio. "Las dosis altas de vitamina D en comparación con la dosis diaria recomendada por la institución no proporcionaron beneficios adicionales", ha insistido.
Los investigadores estudiaron a 221 personas mayores con obesidad que tomaron suplementos de vitamina D a razón de 600 UI/día o 3.750 UI/día durante el transcurso de un año y descubrieron que la suplementación disminuía su presión arterial.
Los investigadores compararon los dos grupos y descubrieron que dosis más altas no proporcionaban beneficios adicionales para la salud. Determinaron que las personas con obesidad y aquellas con niveles bajos de vitamina D eran las que más se beneficiaban.