
La 'mejor receta' para los supervivientes de cáncer
Dieta sana y un estilo de vida activo reducen el riesgo de mortalidad por la enfermedad

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El número de cánceres diagnosticados en nuestro país durante el año 2025 alcanzará los 296.103 casos, lo que supone un ligero incremento del 3,3% respecto a 2024 con 286.664 casos, según el informe 'Las cifras del cáncer en España 2025', elaborado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN). En EE.UU., la enfermedad es la segunda causa principal de muerte
Para la mayoría de los estadounidenses y del resto de la población de países desarrollados que no consumen tabaco, los factores de riesgo de cáncer más importantes que pueden modificarse son el peso corporal, la dieta y la actividad física. Al menos el 18% de todos los cánceres diagnosticados en EE. UU. están relacionados con el sobrepeso, la inactividad física, el consumo excesivo de alcohol o la mala nutrición y, por lo tanto, podrían prevenirse.
Además de evitar los productos de tabaco, mantener un peso saludable, estar activo a lo largo de la vida y llevar una dieta saludable pueden reducir considerablemente el riesgo de desarrollar la enfermedad o morir por su causa a lo largo de la vida. Estos mismos comportamientos también se relacionan con un menor riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas y diabetes.
Si bien estas decisiones saludables las podemos tomar todos, el entorno social, físico, económico y regulatorio en el que vivimos puede favorecerlas o dificultarlas. Se necesitan esfuerzos comunitarios para crear un entorno que nos facilite la toma de decisiones saludables en cuanto a alimentación y actividad física.
Los antecedentes
Desde principios de la década de 1980, el gobierno de EE.UU y las principales organizaciones de salud sin fines de lucro, como la Sociedad Americana del Cáncer (ACS, de sus siglas en inglés) y el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer/Instituto Americano para la Investigación del Cáncer (WCRF/AICR), han publicado directrices y recomendaciones para la prevención del cáncer centradas en el contol del peso, la actividad física, la dieta y el consumo de alcohol. Tras la primera actualización de las directrices del WCRF/AICR. El WCRF/AICR amplió sus esfuerzos y recomendaciones para incluir un Proyecto de Actualización Continua, que informa exhaustivamente sobre diversos tipos de cáncer y se basa en rigurosos protocolos de revisión sistemática.
Es por ello que, en 2022, la ACS actualizó sus directrices de nutrición y actividad física para sobrevivientes de cáncer, recomendando evitar la obesidad, mantenerse físicamente activos, llevar una dieta saludable y limitar el consumo de alcohol. Ahora, una nueva investigación realizada por científicos de la insitutución muestra que un estilo de vida acorde con estas directrices se asocia con un menor riesgo de mortalidad entre los sobrevivientes no fumadores de cánceres relacionados con la obesidad en EE.UU.
Los sobrevivientes que mantuvieron un estilo de vida saludable antes y después del diagnóstico, o quienes mejoraron sus hábitos después del diagnóstico, también presentaron un menor riesgo de mortalidad. El estudio se publica en el 'Journal of Cancer Institute'.

"Un diagnóstico de cáncer suele motivar a las personas a pensar en cómo llevar una vida más saludable. Muchos sobrevivientes desean saber qué cambios en su estilo de vida pueden implementar para mejorar sus posibilidades de vivir más tiempo", ha afirmado en un comunicado el Dr. Ying Wang, científico principal sénior de investigación epidemiológica de la Sociedad Americana del Cáncer y autor principal del estudio.
Y ha insistido: "Estos hallazgos subrayan cómo tomar las decisiones correctas sobre el estilo de vida realmente influye en la supervivencia del cáncer".
El estudio
Los investigadores analizaron los hábitos de vida de los participantes no fumadores de la Cohorte de Nutrición del Estudio de Prevención del Cáncer-II diagnosticados con cánceres relacionados con la obesidad entre 1992 y 2002 hasta 2020. La adherencia posterior al diagnóstico a las pautas de la ACS (índice de masa corporal [IMC], actividad física, dieta y consumo de alcohol) se calificó en una escala de 0 a 8. Se utilizaron modelos para calcular los cocientes de riesgo (HR) ajustados por múltiples variables y los intervalos de confianza (IC) del 95%.
Los resultados del estudio mostraron que entre 3.742 sobrevivientes de cáncer (edad promedio de 67,6 años) con una media de seguimiento de 15,6 años, ocurrieron 2. 430 muertes. Los sobrevivientes con una puntuación de 6 a 8 tuvieron un 24 % menos de riesgo de mortalidad por todas las causas, un 33 % menos de riesgo de fallecer por enfermedad cardiovascular y un 21% menos de riesgo de mortalidad específica por cáncer en comparación con aquellos con una puntuación de 0 a 3.
Las puntuaciones más altas de IMC y actividad física se asociaron con una menor mortalidad por todas las causas. En comparación con los sobrevivientes con una puntuación baja en la guía ACS (menor de 5), tanto antes como después del diagnóstico, aquellos con una puntuación alta (cinco o más) presentaron una menor mortalidad por todas las causas y por enfermedades cardiovasculares. Además, los sobrevivientes que mejoraron su puntuación de baja a alta presentaron una menor mortalidad por todas las causas.