La soledad es una experiencia aversiva que surge de una discrepancia percibida entre las experiencias interpersonales deseadas y las reales, como citan Perlman y Peplau en su libro ‘Loneliness: A sourcebook of current theory, research and therapy’. Es, también, un sentimiento subjetivo y es diferente del aislamiento social, que es un estado objetivo de falta de contacto.
Un estudio de 'Personality and Social Psychology Review' sintetizó los resultados de 75 ensayos que abarcaban diferentes etapas de la vida y sugirió que la soledad es relativamente estable a lo largo de la vida, pero otra investigación reciente de 9 estudios longitudinales encontró un patrón curvilíneo para la soledad a lo largo de la edad adulta, con un repunte en el sénior.
De hecho, en una encuesta, el 43% de los estadounidenses mayores que viven en la comunidad (de 65 años o más) informaron sentirse solos, probablemente debido a una red social cada vez más reducida y una movilidad reducida en la edad adulta, como recoge ‘Gerontologist’.
La 'provocación de la soledad'
La soledad puede provocar el deseo de buscar contacto social. Los adultos mayores utilizan diferentes modos para ayudar a aliviarla, incluido el contacto en persona, por teléfono y digital. El telefónico y el digital pueden ayudar a las personas a superar las barreras geográficas y facilitar el compromiso social cuando el contacto en persona no es posible Sin embargo, no se sabe si el contacto telefónico o digital están asociado con la soledad de los adultos mayores de manera similar al contacto en persona .
Algunos estudios revelan que solo el contacto en persona satisface las necesidades emocionales de los mayores y mejora su bienestar, mientras que otros encuentran que el contacto digital también puede disminuir la soledad en ellos y ellas.
Nuevos hallazgos
Ahora llega una nueva investigación, llevada a cabo Investigadores de la Universidad Texas (Austi, EEUU), que revela que el contacto en persona ayuda a reducir los niveles de soledad en las personas mayores, pero otras formas de mantenerse en contacto, como llamar por teléfono, enviar correos electrónicos o mensajes de texto, no son tan efectivas para reducir la soledad.
Los hallazgos, publicados en 'The Journals of Gerontology: Series B Psychological Science', tienen implicaciones para la salud y el bienestar de muchas personas mayores.
Las declaraciones
"Nos interesaba ver cómo reaccionan los adultos mayores cuando se sienten solos y los efectos que los distintos tipos de contacto social tenían sobre esa soledad", ha comentado en un comunicado Shiyang Zhang, coautora del artículo y becario postdoctoral de la UT en desarrollo humano y ciencias familiares.
Y ha insistido: "Descubrimos que cuandothanks se sienten solos, es más probable que levanten el teléfono y llamen a alguien. Pero las visitas en persona fueron el único tipo de contacto que realmente redujo los niveles de soledad reportada".
Dra. Shiyang Zhang
Los científicos saben desde hace tiempo que el contacto social regular es importante para la salud mental y física y contribuye a la longevidad saludable, mientras que la soledad se ha relacionado con enfermedades cardíacas,deterioro cognitivo e, incluso, muerte prematura.
Aunque muchos adultos mayores enfrentan enfermedades crónicas y problemas de movilidad que pueden dificultar el contacto personal, el nuevo estudio sugiere que éste es un componente importante de cualquier esfuerzo generalizado para abordar la soledad en los adultos mayores.
Las claves del estudio
El estudio se llevó a cabo en el área de Austin (Texas, EEUU), en 2016 y 2017, antes de que la pandemia de Covid-19 expandiera el uso de las comunicaciones digitales para muchas personas y aumentara los niveles de aislamiento para muchos sénior. Pero incluso después de la pandemia, una proporción considerable de ellos no poseen teléfonos inteligentes ni usan Internet. El estudio siguió a más de 300 personas de más de 65 años y les preguntó cada tres horas de vigilia sobre los niveles de soledad y contacto social, incluido si ese contacto era en persona, por teléfono o digitalmente, lo que los investigadores definieron como mensajes de texto o conectarse a través de las redes sociales.
El ensayo también examinó si el contacto social se daba entre personas con vínculos sociales estrechos o débiles. Los investigadores descubrieron que cuando los adultos se sentían solos, era más probable que se pusieran en contacto con sus amigos y familiares cercanos. Resulta que la interacción en persona (incluso con alguien con quien sólo tenían vínculos débiles, como un conocido) predecía niveles más bajos de soledad que, por ejemplo, una llamada telefónica con un familiar o amigo con quien los vínculos eran más fuertes.
"Aunque hablar por teléfono es disponible en la mayoría de los casos y brinda oportunidades de establecer conexiones sociales cuando se sienten solos, parece que éste puede no ser tan eficaz para reducir la soledad como hablar en persona", ha comentado Zhang. "El contacto telefónico y digital no brinda la misma cercanía emocional y comodidad que en persona. Simplemente no es un sustituto".
Sobre el autor:
Patricia Matey
Licenciada en Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid. 1986-1991), es periodista especializada en información de salud, medicina y biociencia desde hace 33 años. Durante todo este tiempo ha desarrollado su profesión primero en el suplemento SALUD de EL MUNDO (22 años), luego como coordinadora de los portales digitales Psiquiatría Infantil y Sexualidad en el mismo diario. Ha colaborado en distintos medios como El País, La Joya. la revista LVR, Muy Interesante, Cambio 16, Indagando TV o El Confidencial. En este último ejerció de jefa de sección de Alimente durante cuatro años. Su trayectoria ha sido reconocida con los premios de periodismo de la Sociedad Española de Oncología Médica, premio Boehringer-Ingelheim, premio de la Asociación Española de Derecho Farmacéutico, premio Salud de la Mujer, premio de Comunicación del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid o Premio de Periodismo de Pfizer. Actualmente es la responsable de la sección Cuídate+ sobre longevidad saludable de 65YMÁS.