Los nuevos sénior ya no envejecen: entran en la sexalescencia pasados los 60 años

Ha llegado para quedarse y su impacto se extiende como la pólvora. Nacemos, crecemos nos reproducimos (o no) y esperamos al  'ángel de la muerte’. Se adora la juventud y tal vez sea esta una de las razones por las que la ha llegado 'una nueva revolución'  de hombres y mujeres de 60 años o más 'bautizada' como sexalescencia: un nuevo fenómeno cultural que emerge con ímpetu inusitado, desafiando al 'establishment' sobre el envejecimiento, como menciona Excelsior.

El término de esta nueva 'moda' ha sido acuñado por el Dr. Manuel Posso Zumárraga, especialista en políticas públicas y de seguridad social con más de 20 años de experiencia en Ecuador -su país natal- y buena parte de Sudamérica. Reconoce en DETONA: "La sexalescencia es un término que identifica a los adultos de 60 o más años. Bueno, como verán, no a todos. Describe a hombres y mujeres que manejan las nuevas tecnologías, son modernos, progresistas, con ganas de disfrutar de la vida, aprender, colaborar con la sociedad, viajar, conocer a gente nueva y ser dueños de su destino. Por lo tanto, no aceptan que se les ubique como personas de la senectud".

Se trata de una generación que ha echado fuera "del idioma la palabra sexagenario, porque sencillamente no tiene entre sus planes la posibilidad de envejecer. Se trata de una verdadera novedad demográfica parecida a la aparición, en su momento, de la 'adolescencia', que también fue una franja social nueva que surgió a mediados del Siglo XX", recuerda el experto.

Este nuevo grupo ha llevado una vida razonablemente satisfactoria. Son hombres y mujeres independientes que trabajan desde hace mucho tiempo y han logrado cambiar el significado tétrico que tanta literatura le otorgó durante décadas al concepto del trabajo. 

La forma de disfrutar de los 'sexalescentes'

Lejos de las tristes oficinas, muchos de ellos buscaron y encontraron hace mucho la actividad que más le gustaba y se ganan ahora la vida con eso. Debe ser por ello que se sienten plenos; incluso algunos ni sueñan con jubilarse. Y los que sí lo hacen, disfrutan con plenitud de cada uno de sus días, sin temores al ocio o a la soledad. Disfrutan el ocio porque, después de años de trabajo, crianza de hijos, carencias, desvelos y sucesos fortuitos, bien vale mirar el mar con la mente vacía.

"La mujer sexalescente pudo sobrevivir al deseo del poderque le dio el feminismo de los 60 y se detuvo a reflexionar qué quería en realidad. Algunas se fueron a vivir solas, otras estudiaron carreras que siempre habían sido masculinas, unas hiciern una carrera universitaria junto con la de sus hijos, otras eligieron tener descendencia a temprana edad o fueron periodistas, atletas o crearon su propio yo", argumenta el Dr. Posso.

Y recalca: "Este tipo de mujeres nacidas en los 50 no son, ni por equivocación, las clásicas 'suegras' que quieren que los hijos les estén llamando todos los días, porque ellas tienen la suya y ya no viven a través de la vida de los hijos".

"La adolescencia a los 70 es posible"

La Dr. Ana Lucas, destacada psicóloga y directora de Tierra W- HEALTH (ubicada en Madrid), posee más de 20 años de experiencia en el campo de la psicología y se ha especializado en terapias de tercera generación, integración cerebral y EMDR (Eye Movement Desensitization and Reprocessing).

En declaraciones a este diario defiende: "La adolescencia a los sesenta es posible y cada día me encuentro a más personas en consulta y fuera de ella que encajan a la perfección en la descripción de sexalescentes. En los últimos años nos hemos cansado de decir que los 40 son los nuevos 30, que los 50 son los nuevos 40 y, así, sucesivamente hasta llegar a esa etiqueta que elimina de un plumazo todo lo que asocia a tener 60 años:  cansancio, senectud, falta de iniciativa y de propósito en la vida".

Dra. Ana Lucas

E insiste: "Tengo una paciente de 65 años. y lejos de pensar en la jubilación, acaba de emprender un nuevo negocio jugándose gran parte de lo que tiene solo por el placer de vivir a tope. Hace deporte, adora lo último en tecnología, en lugar de delegar en sus hijos la configuración de su teléfono móvil, tableta o portátil. Es una apasionada de la cultura y dedica parte de su tiempo libre a actividades benéficas y está escribiendo su segunda novela… En definitiva, su situación vital, pasados los sesenta, le hacen una sexalescente de libro". 

Atrás quedaron los días en que cumplir 70 años era sinónimo de jubilación y de 'bajar el ritmo'. "Hoy en día, muchos sexagenarios se enfrentan a esta etapa con una actitud proactiva y optimista, persiguiendo intereses, pasiones y, en muchos casos, carreras que quizás nunca habían explorado antes. Lejos de entrar en una fase de retirada, se trata de una generación que rechaza la idea de que a su edad el camino esté definido y acepta el desafío de aprender, adaptarse y evolucionar", aclara la experta. 

¿Qué les motiva? 

Para la Dra Lucas, "existen varios factores detrás de esta energía renovada. Uno de ellos es el avance en la salud y la medicina, que permite a muchos llegar a esta etapa con una excelente calidad de vida. La expectativa de vivir más años con buena salud es un incentivo poderoso para aprovechar cada día. Sin embargo, la sexalescencia también se ve alimentada por un deseo de autorrealización. Los sexalescentes quieren explorar quiénes son más allá de sus identidades previas (padres, trabajadores, cónyuges) y esto se traduce en actividades nuevas: desde aprender a tocar un instrumento, hasta viajar a lugares exóticos o iniciar un proyecto artístico. Con una esperanza de vida que se alarga y una salud física y mental que se mantienen fuertes, esta generación de 'jóvenes adultos mayores' se embarca en nuevas aventuras".

Los sexalescentes de hoy se preocupan por mantenerse en forma, tanto física como mentalmente. "Practican deportes, van al gimnasio y cuidan su alimentación. Además, muchos adoptan el aprendizaje continuo como parte esencial de su vida, involucrándose en actividades culturales, educativas y sociales que nutren su intelecto y mantienen su mente activa. Según estudios recientes, mantenerse activo y socialmente conectado tiene un impacto significativo en la longevidad y en la salud mental, y los sexalescentes lo saben bien", recuerda la especialista.

Además de la vitalidad física, "muchos encuentran un sentido de propósito en esta etapa, ya sea a través del voluntariado, de proyectos artísticos o de la participación en comunidades de interés. Todo ello es fundamental para mantener su bienestar psicológico, ya que les permite ver esta etapa, no como una culminación, sino como una oportunidad de reinvención. Si bien la sexalescencia puede parecer un fenómeno moderno, en realidad es el resultado de décadas de evolución social y de inteligencia permeable a mensajes que nos han repetido todo tipo de expertos, cómo llevar una vida saludable. A medida que las sociedades han adoptado un enfoque más inclusivo, en cuanto a la participación de adultos mayores en actividades que antes se consideraban exclusivas de los jóvenes, el 'estigma de la tercera edad' ha comenzado a desaparecer. Hoy en día, la edad es solo un número y el éxito y la satisfacción personal no están atados a etapas de la vida tan definidas", recalca.

El papel de los medios de comunicación 

Los medios de comunicación también han jugado y juegan un papel fundamental en la popularización de la sexalescencia como forma de contrarrestar el edadismo, la estigmatización de las personas por su edad, tan popular en nuestros días. Programas, series y publicidad muestran cada vez más a adultos mayores activos, con vidas interesantes y llenas de proyectos. Esto ha servido como un espejo que devuelve una imagen positiva de la madurez, alejándose de los estereotipos de fragilidad y dependencia, ilustra la psicóloga. 

Argumenta además: "Desde el punto de vista de la Psicología, la sexalescencia es como una invitación simpática para repensar nuestra percepción de la edad y recordarnos que, independientemente de los años, siempre es posible vivir con entusiasmo, explorar nuestras pasiones y desafiar las expectativas. A fin de cuentas, los sexalescentes son un recordatorio de que la vida, en todas sus etapas, está llena de potencial y que cada persona tiene la capacidad de decidir cómo quiere vivir y en qué quiere invertir su energía".

Y recordar, como enfatiza el Dr. Posso, que es Importante, además, "que ellos y ellas no envidien, por ejemplo, la apariencia de 'jóvenes astros del deporte', ni ellas sueñan con tener la 'figura de una vedette'. En lugar de eso, saben de la importancia de una mirada cómplice, de una frase inteligente o de una sonrisa iluminada por la experiencia”, Y destaca: "Hoy, la gente de 60 o 70 está estrenando una edad que todavía no tiene nombre". Y proporciona más claves:

• Antes, los de esa edad eran considerados 'ancianos'; hoy están plenos física e intelectualmente.
• Recuerdan la juventud, pero sin nostalgias.
• Los de 60 y 70 de hoy celebran al sol cada mañana y sonríen para sí mismos muy a menudo.
• Hacen planes con su propia vida, aunque si por ahí se encuentran a alguien con estas afinidades, disfrutan el doble.