Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorPara sentirnos bien es necesario que nuestro cuerpo esté en pleno equilibrio, tanto en el plano físico, emocional y espiritual. Mantenernos en armonía es complejo, más en los tiempo que corren, pero existen algunas técnicas que nos ayudan a encontrar ese equilibrio.
Es el caso del Qigong, también conoció como Chi Kung, una técnica de origen chino que busca conocer, utilizar y optimizar la energía del cuerpo combinando los ejercicios físicos, la respiración y la meditación de manera muy particular.
Te muestro algunos ejercicios sencillos de realizar que pueden ayudarte a mejorar tu estado físico y mental y, también, a mantener un estilo de vida activo.
Lo primero de todo es centrarse en la respiración, pero no como solemos hacer, sino tomando consciencia de ella y haciéndolo con una técnica particular que nos dará bienestar.
Con esta técnica lo que hacemos es equilibrar el cuerpo.
Calentar la musculatura es muy importante y no debemos olvidarlo nunca a la hora de iniciar la práctica de cualquier ejercicio, es una manera de minimizar el riesgo de sufrir una lesión.
Los movimiento han de ser lentos y seguros.
Con este ejercicio podrás reforzar la musculatura de la espalda y además estimular la función renal.
Es posible que no alcances a tocar el suelo con la punta de los dedos. No pasa nada, poco a poco y a medida que vayas haciendo este ejercicio ganarás elasticidad. Es importante que no fuerces más de la cuenta para no dañar el músculo.
A lo largo del día (y de los años) vamos cogiendo malas posturas que acaban cargando diferentes zonas del cuerpo, en especial el cuello, hombros y espalda. Este ejercicio te ayudará a corregir tu postura, a enderezar la espalda, fortalecer estas zonas y mejorar el riego sanguíneo lo que a su vez harás que la musculatura también esté más oxigenada.
Si no tienes buena estabilidad, a la hora de hacer este ejercicio busca un punto de apoyo seguro.
Una manera de apartar el estrés es relajando todo el cuerpo. Para ello:
Igual que en los ejercicios anteriores, los movimientos han de ser lentos.
Con este ejercicio, además de estirar la espalda, conseguiremos aumentar la capacidad pulmonar, obtener energía y mejorar la función hepática, renal y digestiva.