Consejos básicos para que las personas mayores cuiden su salud articular

Es esencial recordar que de una buena salud articular depende algo tan importante como nuestra propia movilidad. Son muchas las patologías relacionadas con el deterioro, rotura o inflamación de ese entramado de cartílagos, tendones y ligamentos que se encargan de crear nuestras articulaciones, por lo que su cuidado es prioritario. El dolor articular está presente en prácticamente todas las enfermedades reumáticas y en otras muchas que afectan al movimiento.

Cómo mantener saludables nuestras articulaciones

Aunque es una realidad que las articulaciones también experimentan el paso de los años, al igual que el resto del organismo, podemos hacer mucho por cuidarlas, consiguiendo así prolongar la agilidad y la independencia en nuestros movimientos. Algunos consejos básicos, que está en nuestra mano seguir, para cuidar la salud articular son:

Ejercicio

Sería realmente complicado encontrar a un médico o especialista que lo desaconseje, porque el movimiento, siempre adecuado a las características y posibilidades de cada persona, favorece la salud articular y la del conjunto del organismo. Incluso en casos de artrosis, la Sociedad Española de Reumatología (@SEReumatologia) recomienda realizar algún tipo de deporte de bajo impacto como caminar, nadar o montar en bicicleta.

Hacer ejercicio ayuda a evitar la obesidad, que puede afectar negatitvamente a las articulaciones, y además contribuye a desarrollar la musculatura, esencial en la protección de nuestro esqueleto, articulaciones incluidas.

Evitar la sobrecarga

La actividad física, acorde a tus propias posibilidades, siempre resulta beneficiosa, pero hay que tener cuidado a la hora de “forzar” una articulación por un exceso deportivo. En este sentido, la Lliga Reumatológica Catalana (@llrcat) recuerda la importancia de realizar un buen calentamiento antes del ejercicio y dar al organismo un tiempo mínimo de recuperación.

A la hora de cuidar la salud articular también aconseja alternar distintos ejercicios para evitar la sobrecarga. Por ejemplo, si practicas running, combínalo con otras actividades como el yoga, el Pilates o la marcha nórdica.

Dieta sana y equilibrada

El exceso de grasas, especialmente si hablamos de aquellas menos saludables, no favorece el buen estado de las articulaciones. En cambio, los alimentos ricos en ácidos grasos saludables como el Omega 3 y 6, presentes en el aceite de oliva o el pescado, son excelentes aliados de la salud articular. Siempre consultando previamente con el especialista, un suplemento de colágeno puede ser de ayuda para proteger cartílagos y ligamentos.

Otros detalles que importan

Hay pequeños gestos que contribuyen al cuidado de nuestras articulaciones. Mantener una buena postura corporal (incluso durante el descanso nocturno), utilizar un calzado adecuado, especialmente a la hora de hacer deporte; y tener especial cuidado a la hora de coger o cargar peso de la forma adecuada son algunas de las medidas que pueden ayudarnos a mantener nuestras articulaciones sanas por más tiempo.