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Deporte para mayores
Deportes de raqueta: cuáles son más adecuados para mayores y con cuáles hay que tener cuidado
Jugar con moderación al tenis puede ser saludable y divertido
Emular a Rafael Nadal no tiene sentido. Y menos cuando se tienen más de 65 años. Pero practicar deporte es muy saludable. Además los juegos de raqueta suelen ser muy divertidos.Nunca viene mal practicar algo de ejercicio pasados los 65 años y si, en tu caso, te apasionan los deportes que tienen a las raquetas como protagonistas, quizá te interese seguir leyendo.
En este artículo te recomendaremos los mejores juegos para tu edad, así como aquellos deportes con este elemento que es mejor que no practiques ya que podría suponer un riesgo para tu salud.
Por ejemplo, no es muy recomendable practicar este tipo de deportes si se tienen problemas de visión ya que apenas alcanzaremos a darle a la pelota o si padecemos problemas graves de rodilla o de hombros ya que se trata de unos juegos que causan un importante impacto en esas articulaciones.
Tenis con moderación
Sin duda, el deporte estrella usando una raqueta como todos sabemos. Hablamos de un deporte que se puede practicar tanto en el exterior como en el interior cuando las temperaturas no son tan benévolas como para jugar un partido al aire libre; además de poder ejercitarse en varias superficies muy dispares: desde césped, pasando por tierra o cemento en los espacios más convencionales.
Dos contrincantes o cuatro (dobles) que se retan a un partido con la pelota como protagonista que van botando sin parar entre cada uno de los campos de juego con la red y las líneas de juego como principales "jueces" cuando no hay un árbitro, profesional o no, de por medio. Precisamente, ese juego en parejas es el más adecuado para las personas mayores de 60 años ya que requiere de un menor esfuerzo, corriendo de un lado a otro del campo, para alcanzar esa pelota.
Y es que aunque hablamos de un deporte que no tiene edad, sí que es cierto que los mayores no pueden olvidar que deberían no practicarlo en los casos en los que se tenga una cardiopatía grave. En estos casos es mejor optar por una actividad física más suave y moderada.
Para los que no tenga ninguna afección importante, y ajustando siempre esta modalidad deportiva a sus capacidades, una buena rutina de partidos de tenis ayudará a mejorar su musculatura, además de incrementar la concentración y los reflejos al intentar darle a la pelota con la raqueta.
Pádel, una opción más cómoda
Es un deporte parecido al anterior, en lo de la red y la zona de juego, pero en este caso ese espacio es inferior y se encuentra encerrado en cuatro paredes. Otra de las diferencias es que la raqueta con la que se juega es de dimensiones más reducidas, por lo que puede resultar más cómoda para las personas mayores ya que son más ligeras si las comparamos con las que se usan para el tenis.
Además, el hecho de que importe más la técnica que la forma física y que se juegue en una pista de más pequeña hacen de él un juego ideal para aquellos que superan los 65 años.
Bádminton, más divertido de lo que parece
Esta otra actividad deportiva también se realiza en un entorno acotado por paredes en las que puede rebotar la pelota, de forma válida, salvo si se trata del movimiento de saque. Una de las diferencias estriba en que en lugar de jugar enfrentados, ambos jugadores hacen sus movimientos hacia adelante, contra una de las paredes. Como si fuese el frontenis de toda la vida vamos.
La pega que podemos encontrar en este deporte de raqueta es que la combinación de movimientos, que se hacen de forma muy dinámica, pueden resultar muy cansados y extenuantes para una persona mayor que no pueda seguir ese ritmo natural que impone el devenir del juego.
Igual de intenso que si echamos una partida entre amigos al bádminton. La principal característica de este juego es que en lugar de una pelota se usa una especie de volante que debe estar siempre en el aire. En el caso de que toque el suelo, perderemos ese punto. Esto y el hecho de que sea un elemento que no tiene el peso de una pelota convencional hace que sea necesario un mayor trabajo para trasladarlo al otro campo y seguir de forma adecuada un partido.
Tenis de mesa
Quizá, de todos los deportes con raqueta que hemos ido desgranando a lo largo de estas líneas, este sea el más aconsejado para los mayores. No tanto por asociarlo a un juego aburrido o carente de emoción en la que apenas uno se mueva (solo hay que ver la agilidad de los jugadores de origen chino en campeonatos internacionales), sino que es el deporte que más se ajusta a las especiales características de salud que pueda tener una persona mayor.
El tenis de mesa, con un origen inglés en el siglo XIX, se juega en una mesa que no llega a los 3 metros de longitud y con unas pequeñas raquetas de un tamaño parecido a la mano. Y es que lo bueno de este deporte es que no se requiere un cuerpo de atleta para empezar a ganar partidas en este curioso juego que tiene mucho de componente psicológico y de habilidad mental. ¡Y es que hasta el cerebro se ejercita con el ping-pong!
Por si fuera poco, es una de las soluciones más sanas para favorecer tu coordinación con la pelota, al tiempo que te mueves un poco y mejoras tu forma física sin apenas darte cuenta.