Olga Selma
Olga Selma es redactora especializada en temas de salud, alimentación y consumo.
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Domingo 3 de julio de 2022
ACTUALIZADO : Domingo 3 de julio de 2022 a las 10:05 H
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Es provable que en alguna ocasión hayas sentido dolor de cabeza justo después de entrenar. Los dolores de cabeza de tipo tensional, los más comunes, puede aparecer durante el entrenamiento o justo después. Este tipo de dolor se siente como un dolor constante, como tener una banda alrededor de la cabeza, en lugar de un dolor punzante, como una migraña. A menudo se experimentan en ambos lados de la cabeza, y no son un síntoma que debamos desatender porque nos indican que estamos procediendo de forma incorrecta para nuestro bienestar. Además, pueden venir acompañados de otros síntomas como mareos, náuseas o sensibilidad a los ruidos y a la luz.
Si el dolor de cabeza se inicia mientras estamos haciendo ejercicio se califica de cefalea primaria, y suele durar entre cinco minutos y 48 horas. La causa suele ser debido a la deshidratación, que en ocasiones se une a un descenso de azúcar en sangre. Si nos falta glucosa, que actúa como motor de energía, el cuerpo acusa el sobreesfuerzo y responde con esta sintomatología.También es importante cuidar la postura, porque si no es la correcta, tanto al hacer pesas, abdominales u otros ejercicios de fuerza, nos acabará doliendo la cabeza, además de otras partes del cuerpo.
La deshidratación es una de las causas más comunes, por lo que debemos beber suficiente agua antes, durante y después de hacer deporte. Además, los espacios muy calurosos y del exceso de sol durante el entrenamiento aumentan la pérdida de líquidos. Evita entrenar al sol o cuando hace mucho calor. Tampoco vayas a entrenar con el estómago vacío, ni después de una comida copiosa. La idea es que te sientas fuerte para exigir un plus a tu organismo.
Para algunas personas, calentar lentamente antes de hacer ejercicio puede ayudar a prevenir los dolores de cabeza. En otros casos, reducir la intensidad del entrenamiento también ayuda a prevenirlos. Si estamos en el gimnasio, podemos consultar con nuestro monitor si hacemos bien los ejercicios y nuestra postura es la correcta, así como adaptarnos a otras opciones menos exigentes si vemos que no puedemos realizar los ejercicios con facilidad. La idea es ir mejorando la forma física poco a poco, sin exigirnos demasiado.
Si tienes dolor de cabeza después de tus entrenamientos, prueba a relajar los músculos aplicando calor, masajeando o haciendo estiramientos que permitan relajar los músculos cervicales. La mayoría de los pacientes con cefalea tipo tensión presentan ataques leves o moderados que suelen remitir con toma de analgésicos comunes, así como aplicar una almohadilla térmica en la cabeza para abrir los vasos sanguíneos, tal y como indica la Sociedad Española de Neurología (SEN).