Ejercicio físico a partir de los 60: ¿por dónde empiezo?

La edad ya no se acepta como excusa para no hacer ejercicio. De hecho, si realizar ejercicio físico es saludable a cualquier edad, en las personas mayores se vuelve una necesidad. A medida que vamos cumpliendo años nos vamos adentrando en un sector que ya no puede descuidar su forma física. Todo lo contrario, debemos poner mucho empeño en mantenernos activos para evitar la pérdida de masa muscular y ósea.

Los expertos defienden que practicar deporte es especialmente beneficioso para las personas mayores. Según han comprobado en numerosos estudios, la gimnasia ayuda a evitar la pérdida de masa ósea y la atrofia muscular propias de la vejez. Pero además se convierte en antídoto contra los problemas metabólicos, las enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, las neurodegenerativas, y las caídas. Practicar gimnasia también potencia la secreción de endorfinas (las conocidas como hormonas de la felicidad), las relaciones sociales y mejora el descanso, por lo que la lista de beneficios se hace interminable.  

Y aunque lo ideal es que el deporte forme parte de nuestra rutina diaria desde que somos niños, lo cierto es que el sedentarismo se ha implantado como estilo de vida predominante. Comenzar a ponerse en forma supone un esfuerzo y dedicación que no todo el mundo está dispuesto a realizar, y el envejecimiento suele ser una de las barreras más difíciles de superar. A continuación, te presentamos algunas recomendaciones para elaborar un plan de acción que te ayude a comenzar a hacer ejercicio físico y no abandonar: 

Nunca es tarde para empezar a cuidarse

Para quien no está habituado a realizar ejercicio físico comenzar con clases de fitness o gimnasia no es fácil. Sin embargo, con la ayuda y asesoramiento de un profesional, y tablas de ejercicios o deportes adaptados a las necesidades de casa uno, todo el que se lo proponga puede empezar a entrenar y ver como su calidad de vida mejora día a día. Sin importar la edad.

Elige una práctica que se adapte a ti

Dentro del mundo del deporte tienes infinidad de opciones que puedes ayudarte a estar más activo y mantener tu forma física. Jugar al fútbol, bailar, correr, pilates, nadar, o simplemente salir a caminar y hacer estiramientos. Lo importante es que te guste y disfrutes para llegar a conseguir el compromiso suficiente para hacer con regularidad.

No te exijas demasiado

El objetivo es empezar a moverse. Al principio es recomendable que comiences poco a poco. Si empiezas con demasiada exigencia correrás el riesgo de tener dolor, agujetas, o incluso peor, lesionarte.  Cuando cojas la rutina te resultará más sencillo incrementar los periodos hasta conseguir realizarlos de forma habitual.

Olvida el peso, lo importante es mejorar cada día 

Durante las primeras semanas debes fijarte y comprobar que te encuentras bien, quizás algo más cansado y con agujetas, pero nada que no te impida seguir con tu nueva vida activa. Prueba a aumentar tu sesión de ejercicio habitual entre 5 y 10 minutos, y también puedes incluir nuevos ejercicios a tu rutina.

Consulta a tu médico

Si tiene dudas sobre tu capacidad y estado físico antes de empezar, es recomendable que visites a tu médico de cabecera. Él puede hacerte pruebas para saber con qué condiciones partes. Además, te puede recomendar las actividades más apropiadas para ti.