Verónica Mollejo
Deporte para mayores
Foam roller, la nueva herramienta que querrás incorporar a tus entrenamientos
Este accesorio lidera una técnica muy popular en la actualidad: ¿has oído hablar del foam rolling?
Debido a la popularidad de la que actualmente disfruta el mundo del deporte y el culto al cuerpo, son muchas las modalidades e instrumentos que surgen cada año para romper con la monotonía, hacer más entretenido el entrenamiento o conseguir nuevos beneficios. Este es el caso del foam roller, un elemento que sirve principalmente para facilitar la recuperación muscular y mejorar la amplitud y el movimiento.
Este rodillo de espuma rígida se utiliza dentro de una técnica muy concreta: el foam rolling o la auto-liberación miofascial, una especie de automasaje que busca liberar los famosos puntos gatillo, es decir, esos nódulos que se localizan en los músculos y causan dolor, aplicando presión sobre ellos.
Cuídate después del entrenamiento
Además de poder recurrir a él en casa, asegurar la descarga muscular y mejorar el equilibrio y la flexibilidad de los músculos, el foam roller comparte otra serie de ventajas como, por ejemplo, calentar el tejido que recubre la musculatura, conocido como fascia; perfeccionar la postura corporal, ayudar a superar las lesiones y activar la circulación de la sangre, entre otros. No obstante, para disfrutar de todos ellos, debe seguir una serie de consejos:
- Si eres principiante, lo mejor es que escojas en primer lugar un modelo más largo y suave, para que sea más sencillo manejarlo y se acomode a tu postura. Eso sí, el diámetro no debe ser muy reducido, pues requerirás un mayor esfuerzo para ejecutar los movimientos.
- Además, antes de comenzar la rutina de foam rolling, se recomienda aflojar los nudos con ayuda de tus dedos para que sea mucho más fácil alcanzar la liberación muscular.
- Aunque la extensión depende del estado de cada individuo, lo normal es dedicar unos 20 o 30 segundos a cada ejercicio. Sin embargo, en total, el conjunto no debe superar los 20 minutos para evitar que sea demasiado agresivo.
- La espalda y la banda iliotibial, que es el tendón que recorre la parte exterior de la pierna, son dos de las zonas más trabajadas con el foam roller, pero también de las más delicadas. Un mal movimiento o una presión excesiva puede provocar serias lesiones.
- Por otro lado, los expertos alertan que el rodillo no debe aplicarse en las articulaciones y que los movimientos deben realizarse de manera transversal, nunca longitudinal.