El Gobierno de Andorra ha acordado incrementar la tarifa eléctrica para los clientes domésticos en un 8% de media y un 17% para los clientes profesionales a partir del 1 de diciembre.
La medida la anunciaron en una rueda de prensa extraordinaria el martes el jefe de Gobierno, Xavier Espot, y la ministra de Medio Ambiente, Agricultura y Sostenibilidad, Sílvia Calvo, aunque hace tan solo unos días desde el Ejecutivo se insistía que no habría ninguna subida más de las tarifas después de la aplicada el pasado mes de abril.
En un comunicado, el Ejecutivo ha explicado que toman esta decisión dado el contexto de crisis energética global, el conflicto bélico en Ucrania, la subida de los precios de compra de electricidad y el impacto negativo que esto supone para las cuentas de FEDA, la compañía eléctrica nacional.
Espot ha recordado que la conjetura nacional y global en relación a la energía es delicada y obliga a tomar nuevas medidas, ya que las implementadas hasta el momento "son del todo insuficientes" para conseguir el ahorro del 15% fijado antes de los meses de más consumo y garantizar el suministro de los proveedores de energía –Andorra importa el 80% de la electricidad que consume desde Francia y España–.
Espot ha explicado que en dos ocasiones este octubre España cortó el suministro de energía al Principado, hecho que obligó a activar el plan de contingencia de FEDA para que los ciudadanos no notaran las consecuencias e incrementar la producción hidroeléctrica nacional al máximo, al mismo tiempo que se necesitó más suministro des de Francia.
También ha apelado a la corresponsabilidad de todos los sectores porque considera que la solución solo depende de su capacidad de "renunciar a lo superfluo" e incorporar o abandonar ciertos hábitos, ha dicho.
Supondrá entre 3 y 5 euros más en la factura mensual
Así, se prevé un incremento de tarifas para limitar el impacto económico de las subidas de precios de la electricidad en los países vecinos pero intentado minimizar los efectos sobre las familias con consumos moderados.
La propuesta, que entrará en vigor el 1 de diciembre, prevé un incremento medio del 8% para la mayoría de clientes domésticos, lo que supondrá entre 3 y 5 euros más en la factura mensual, mientras que en el caso de los profesionales el aumento será del 17%.
Tarifas por debajo de las de los vecinos
Por su parte, Calvó ha insistido que las tarifas siguen muy por debajo que las de los países vecinos, ya que en Francia los precios son un 50% superiores mientras que en España representan el doble de los que se aplican en Andorra.
En la misma rueda de prensa han anunciado un paquete de medidas de ahorro energético que implica tanto a administración general, los ayuntamientos, el sector empresarial y los particulares.
Así, todas las medidas que ya se aplican en la administración general serán de aplicación también en los entes locales, si bien se contempla alguna "particularidad", como que el alumbrado navideño solo podrá funcionar durante 6 semanas consecutivas, deberá apagarse a medianoche y se tendrá que reducir un 30% el consumo respecto el año pasado.
En el caso del sector privado, las temperaturas en los locales no podrán ser inferiores a los 26 grados durante el verano ni superiores a los 20 en invierno y la climatización y las luces interiores deberán apagarse durante los horarios no laborales y los días festivos.
El alumbrado exterior y de los escaparates solo podrá estar encendido hasta el cierre del comercio; se prohibirá el alumbrado nocturno de letreros y anuncios publicitarios y las luces de Navidad solo podrán funcionar entre el 1 de diciembre y el primer fin de semana de enero y nunca hasta más tarde de las 22.00 horas.
Para los ciudadanos se harán recomendaciones de ahorro energético relativas a la temperatura de los hogares, las luces, los aparatos eléctricos y la movilidad sostenible.
Ayudas
En paralelo, Espot y Calvó han anunciado un plan de acompañamiento para hacer frente a la situación con una ayuda de 150 euros para pagar la calefacción para hogares en situación de vulnerabilidad.
También han pospuesto un año la aplicación de la tasa verde prevista para el 2023 para los gasóleos de calefacción y han incrementado la devolución parcial del impuesto especial a los hidrocarburos para taxis y vehículos de transporte de mercancías de entre 3.500 y 7.500 quilos, pasando de los 3.000 litros actuales a los 8.000.
